El primer país europeo que se abre a prohibir los fuegos artificiales

El primer país europeo que se abre a prohibir los fuegos artificiales

A través de una recogida de firmas que está muy cerca de convertirse en una iniciativa popular federal.

Vista aérea de Basilea.Getty Images

Europa ya ha abierto uno de esos debates de difícil solución. No ha sido la Unión Europea, sino un estado 'neutral', el primero en abrir en firme la cuestión de si prohibir o no los fuegos artificiales.

Como informa XatakaSuiza se ha abierto a esta cuestión en pleno tiempo de festivales de verano. Feuerwerksinitiative, que cuenta con el respaldo de Greenpeace, Animal Rights Switzerland o incluso el Zoo de Zúrich, entre otros organismos, han lanzado una campaña de recogida de firmas para limitar el uso de la pirotecnia en el país. 

El objetivo es llegar a 100.000 firmas con las que impulsar una iniciativa popular federal, de efectos similares de las iniciativas legislativas populares en España. Y por ahora ese objetivo parece muy posible, porque la campaña ya pasa de los 90.000 apoyos. 

La asociación Feuerwerksinitiative ya ha recibido el apoyo no solo de entidades animalistas y ecologistas, sino de figuras relevantes como el médico Daniel Koch o la exjinete Christine Stückelberger, medallista olímpica en hípica.

En la web de la Confederación Suiza, donde se detalla la iniciativa popular, se precisa que la recogida de rúbricas arrancó en mayo de 2022 y expirará en noviembre, tiempo más que de sobra para rematar las algo menos de 10.000 rúbricas que quedan para llegar a las ansiadas 100.000. 

De hecho, se espera que pueda lograrse para el 1 de agosto, fecha simbólica por ser el Día Nacional de Suiza y, por ende, una de las jornadas con más lanzamientos de fuegos de todo el calendario helvético.

Los impulsores alegan que "La alegría de unos pocos no debe afectar a la calidad de vida de todos los demás". "Durante la sequía, en verano, los fuegos artificiales descontrolados ponen en peligro la flora y fauna", razonan desde la asociación detrás de la iniciativa y añaden que también suponen "una fuente de estrés para las personas sensibles al ruido", cita Xataka.

La iniciativa propone que se prohíba la venta y el manejo de fuegos artificiales ruidosos. Y que cuando se hagan excepciones en citas "de trascendencia suprarregional" sean las autoridades cantonales las que concedan los permisos, siempre con una solicitud previa.