Acude esperanzada a vender unas pulseras de plata que le regaló su ex, le hacen la prueba de valor y tasador y clienta salen descolocados
El momento incómodo entre ambos arrasa en TikTok por su mezcla de ironía y sorpresa

Lo que empieza como una tasación rutinaria termina en una escena que ni escrita por un guionista de comedia negra. El vídeo, publicado por la empresa Plata Hispánica en su cuenta de TikTok, se ha disparado en visualizaciones y comentarios en las últimas horas. ¿El motivo? Una clienta que entra decidida a sacarle dinero a unas pulseras supuestamente de plata que le regaló su ex… y acaba llevándose una sorpresa tan inesperada como incómoda. “Hola, buenas, mira, venía a ver cuánto me darías por esto”, se le oye decir al principio. El tasador, con gesto profesional, pregunta: “¿Sabes si son de plata?”. “Me lo regaló mi ex. Me dijo que era plata de ley, así que a ver cuánto le puedo sacar”, responde ella con calma. Lo que viene después cambia el tono del encuentro por completo.
El trabajador le explica que va a hacer una prueba rápida con ácido. “Si se pone verde y empieza a burbujear, significa que no es de plata”, advierte. Efectivamente, el metal reacciona mal. “Esto no tiene nada de plata”, confirma. La clienta, sorprendida, no tarda en soltar el comentario que ha provocado carcajadas en redes: “Bueno, digamos que él era liberal sin yo saberlo”. El dependiente remata: “Pues también un poco mentirosillo, porque esto no es de plata”. Ya no hay tasación posible. Ella recoge las pulseras y lanza una frase que podría ser el lema del vídeo: “Pues nada, dámelas que se las voy a devolver”. Cierre con aplauso.
Una escena que parece sacada de una serie
La fórmula vuelve a funcionar. Plata Hispánica, que se define como líder en compra de oro y plata en España, ha hecho de estos vídeos un formato recurrente en sus redes sociales, donde combina pedagogía sobre metales preciosos con historias que suenan a ficción, pero ocurren delante de la cámara. En esta ocasión, lo que engancha no es solo el engaño sobre el valor real de la joya, sino el tono desenfadado con el que la clienta despacha la situación y deja caer la carga emocional del regalo.
El momento exacto en el que el ácido revela la falsedad de la pulsera, y el gesto del tasador, han dado pie a miles de comentarios, muchos centrados en la frase sobre el “liberalismo” del ex, convertida en meme espontáneo. En apenas un minuto de vídeo, la escena logra conectar con algo más universal: esa mezcla de decepción, ironía y revancha que convierte una tasación fallida en una historia con final viral.