España no es Italia (pero juntas hacen temblar Europa)

España no es Italia (pero juntas hacen temblar Europa)

EFE

Tormenta en la política italiana. Borrascas en la vida institucional española. Roma sigue sin gobierno y podría celebrar nuevas elecciones en los próximos meses. España vive quizás sus últimos días con Mariano Rajoy en la Moncloa. Las Bolsas reiteran fuertes caídas y la zona euro, todavía sin los deberes hechos para amortiguar las crisis, podría revivir sus peores días.

La UE aborrece la incertidumbre y los temblores del sur inquietan en el establishment europeo. Con todo, los líderes de las principales fuerzas políticas del Parlamento Europeo consultados por este diario se muestran cautos a la hora de equiparar la crisis política española a la italiana, pero la mayoría apela a la estabilidad.

Ni los afines a Sánchez muestran gran entusiasmo por la moción de censura planteada por el PSOE – aunque sí la apoyan - ni hay una defensa airada de la permanencia de Rajoy en la Moncloa por parte de los líderes conservadores en la Eurocámara, más allá de sus apelaciones a la responsabilidad y la estabilidad.

"Espero que los políticos españoles trabajen en defensa de los intereses de los ciudadanos españoles, a favor de la estabilidad", explica en tono institucional Antonio Tajani, presidente del Parlamento Europeo y miembro de Forza Italia, parte del grupo popular. "Miro también a mi país con preocupación. Confío en los ciudadanos italianos como los españoles para ayudar a la economía de dos países importantes de Europa", responde Tajani a El HuffPost en una rueda de prensa este martes.

Ante la perspectiva de que una nueva convocatoria electoral en Italia se convierta en una suerte de referéndum sobre el euro, tras el fracaso de los antiestablishment Cinco Estrellas y la extrema derecha de la Liga Norte por formar gobierno, Tajani sube el tono. "Es una tontería intentar dejar el euro porque supone actuar contra los ciudadanos italianos, las empresas, grandes, pequeñas y medianas; es añadir paro porque matar las empresas es matar el trabajo. Voy a hacer todo lo que pueda como presidente del Parlamento y como diputado europeo italiano para defender la presencia de Italia en la zona euro".

El alemán Manfred Weber, líder del Partido Popular en la Eurocámara, la familia política de Rajoy, se muestra preocupado con la moción de censura en España: "Vi una mayoría clara votar a favor del presupuesto, lo que suponía dar estabilidad para España. Después hemos visto la moción de censura contra el gobierno de Rajoy. Estoy sorprendido. Creo que todos deberíamos ser responsables", explica el líder de los populares.

Weber apela a la buena marcha económica de España, pero evita una defensa cerrada del gobierno español y el presidente Rajoy: "Hay una tendencia económica positiva, pero no lo suficientemente estable para crear el número de puestos de trabajo que los españoles necesitan. Todo el mundo debería saber que la estabilidad de España está en juego y espero que todos los partidos políticos se comporten de forma responsable", concluye el alemán.

"En España el liderazgo del PP está enfrentándose a grandes escándalos de corrupción. El próximo viernes 350 diputados tienen una elección: comportarse de forma responsable y con todo respeto con sus ciudadanos o no", ha difundido en sus redes sociales Udo Bullmann, el nuevo líder de los socialdemócratas en la Eurocámara.

Con todo, no se ha referido públicamente al asunto ni está contemplado en la agenda de trabajo oficial de los socialistas europeos (aunque previsiblemente los españoles explicarán el tema al resto de sus colegas).

España no es Italia

"No compare España con Italia", responde en un encuentro con la prensa a El HuffPost el líder de los liberales Guy Verhofstadt. "No veo ninguna inestabilidad en España. Lo que sí veo es la posibilidad de ver a otro gran partido llegar al poder, me refiero a Ciudadanos. Tienen un proyecto muy reformista y pro-europeo. Sólo veo cosas positivas en el programa de Ciudadanos. Exactamente lo que necesitamos en España y Europa", explica el que fuera también primer ministro de Bélgica.

Sobre la posibilidad de que Ciudadanos se quede descolgado del cambio en España si prospera la moción del PSOE sin su apoyo, Verhofstadt echa balones fuera. "Sólo estoy al tanto de la posición oficial de Ciudadanos y lo que han pedido son elecciones anticipadas", explica el líder liberal, familia europea de la que forma parte el partido de Albert Rivera.

"Con las encuestas situando el 69% de los votos a favor de partidos centristas en España, alguien debería explicar cuál es el paralelismo con el riesgo político creado con la situación en Italia", se pregunta Antonio Barroso, subdirector de análisis de la consultora de riesgo político Teneo Intelligence.

"Creo que los mercados llevan tiempo sin prestar suficiente atención a lo que está pasando en el sur de Europa. La crisis política en Italia ha puesto el acento en la región y al coincidir con la moción en España se ha generado cierta confusión. Algunos de mis clientes me preguntan de nuevo por Portugal y llevaban año y medio sin hacerlo", explica Barroso en conversación telefónica desde Londres.

"Cada vez que hay una crisis en un país de la UE, aumenta la presión sobre la zona euro. Lo vimos en Grecia, también en España, Portugal, lo vimos en Irlanda y lo vemos ahora en Italia. No es la primera vez. Soy incapaz de dar un consejo a Italia, pero lo que debemos hacer a nivel europeo es cambiar el sistema con una gobernanza coherente, con capacidad presupuestaria justamente para que no esté influida por crisis nacionales, que es lo que pasa hoy", remata Verhofstadt.

La guinda amarga del día la han puesto este martes unas declaraciones incendiarias del vicepresidente de la Comisión y responsable de Presupuestos, el conservador alemán Günther Oettinger. En una entrevista con Deutsche Welle, ha afirmado que espera que los mercados jueguen un papel en la campaña italiana, y que envíen "una señal" para impedir que los populistas lleguen al gobierno. ¿Los mercados financieros explicando a los italianos qué tienen que votar? En Italia, desde Berlusconi hasta Matteo Salvini, líder de la Liga Norte, han entrado en cólera y Juncker ha salido a toda velocidad a desmentirle en un durísimo comunicado, pidiendo respeto para Italia. El propio Oettinger, considerado un fiel aliado de la canciller Merkel, ha pedido disculpas.

Pero el daño está hecho: gasolina para los euroescépticos italianos, que volverán a afrontar las urnas mientras la prima de riesgo italiana (y la española) se disparan.