'The New York Times', muy claro sobre cómo afecta Juan Carlos I al reinado de Felipe VI

'The New York Times', muy claro sobre cómo afecta Juan Carlos I al reinado de Felipe VI

El prestigioso periódico estadounidense aborda el regreso del emérito a España.

Juan Carlos I y Felipe VI, en una imagen de archivo.Carlos Alvarez via Getty Images

Casi dos años después de marcharse a Abu Dabi asediado por las informaciones sobre sus escándalos financieros, el rey emérito, Juan Carlos I, regresaba este jueves a España para pasar unos días en Sanxenxo y, después, visitar a su hijo, el rey Felipe VI, y a su mujer, la reina emérita Sofía.

Después de dicha visita en Zarzuela, que tendrá lugar este lunes, Juan Carlos I regresará a Abu Dabi.

Es, sin duda, una de las noticias del año y ha copado los informativos y medios de España pero también ha sido seguida desde el resto del mundo.

El prestigioso diario estadounidense The New York Times también ha tratado la información, en la que recuerdan que quien fuera jefe de Estado en España se marchó “en mitad de las investigaciones por fraude”, “en particular sobre si habría recibido y lavado millones en sobornos”.

Tras repasar su trayectoria inicial como rey durante la Transición, el rotativo señala que “su lujoso estilo de vida, las aventuras extramatrimoniales y los negocios comenzaron a ser duramente criticados” hace ya una década, más aún “cuando España estaba sumida en una crisis bancaria que obligó a su Gobierno a negociar un rescate internacional”.

Aunque The New York Times destaca que el emérito ha regresado a España una vez ha sido absuelto, deja claro que “las investigaciones han manchado significativamente su reputación y la de la monarquía española”.

También destaca este diario que Juan Carlos I se verá este lunes con Sofía, la reina emérita, y que precisamente “una de las investigaciones se centró en cómo transfirió millones en 2012 a una cuenta en las Bahamas perteneciente a una empresa de su ex amante”, la empresaria y aristócrata Corinna Larsen.

De hecho, recuerda The New York Times que el emérito no tiene todas las causas cerradas, ya que un juez del Reino Unido mantiene abierta la investigación por la denuncia de Larsen contra Juan Carlos I por la vigilancia a la que le sometió el CNI. El magistrado rechazó la inmunidad del rey cuando se produjeron estos hechos como argumento para archivar el caso.