El animal de España en serio peligro de extinción que ha experimentado una recuperación histórica hasta alcanzar los 2.000 ejemplares
Muchos lo consideran un milagro, aunque ha sido un arduo trabajo de las autoridades..

Hasta hace 15 años, la especia ibérica por antonomasia se encontraba en una situación crítica, casi desahuciada, con solo 100 ejemplares. Se trata del lince ibérico y el cambio que ha experimentado en los últimos años podría catalogarse casi de milagro.
Contra todo pronóstico, el lince ibérico ha conseguido resurgir de una forma sin precedentes, pasando de los 100 ejemplares mencionados a los más de 2.000 en estos pocos años. Y no solo eso, sino que ha conseguido establecerse y consolidarse en 14 núcleos poblacionales. En palabras de Francisco Javier Salcedo Ortiz, coordinador del proyecto LIFE Lynx-Connect, a Público, se trata de la "mayor recuperación de una especie de felino lograda a través de la conversación".
Todos los ejemplares se encuentran repartidos entre Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura y en el Valle del Guadiana en Portugal. Así, su lugar predilecto para reproducirse y desarrollarse como especie son los hábitats que cuentan con matorral mediterráneo.
En cuanto a su alimentación, hay que destacar que el conejo es clave, ya que supone el 75% de su alimentación, aunque pueden complementar su dieta con ciervos o perdices. Sin embargo, la ausencia de conejos en los últimos años en sus hábitats aceleró su desaparición En lo que se refiere a su renacimiento, el proceso ha contado con varios factores decisivos.
Para ello ha sido necesaria la "colaboración comprometida entre organismos públicos, instituciones científicas, ONGs, empresas privadas, etc.", tal y como apunta Salcedo. Así, el plan establecido se enfoca desde los años 90, cuando se comenzó a seguir una hoja de ruta a nivel autonómico, nacional y europeo. Sin embargo, durante la primera década, los efectos no fueron los deseados, debido entre otras cosas, a varias medidas contrarias a su estabilización: deforestación, destrucción de su hábitat, etc.
Pero tras tocar fondo en 2006, las medidas de conservación y mejora de sus poblaciones se tomaron en serio como nunca antes, con fuertes sanciones en caso de cazar o matar a los linces, recuperando poblaciones de conejo para darles alimento y protegiendo y creando y repoblando distintas áreas con linces.
Todo ello con un seguimiento exhaustivo y anual de todos los ejemplares vivos. Así, lograron incrementar poco a poco la población, incorporando cada vez más regiones en las que están presentes, como ahora con la reintroducción en la Región de Murcia. Esto, junto a una mayor concienciación de la sociedad y a un mayor compromiso por parte de todos, ha supuesto un paso decisivo.