Se descubre un extraño poder en las tortugas debido al campo magnético de la Tierra
Y realizan una especie de baile.
Hasta ahora, era prácticamente un misterio el cómo las tortugas marinas logran volver a su lugar de origen para alimentarse o anidar después de sus largas migraciones oceánicas.
Un reciente estudio de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill y publicado en Nature ha descubierto que son capaces de usar el campo magnético de la Tierra como si fuera un mapa —para determinar la posición geográfica— y como una brújula —para determinar la dirección en que se encuentran—, recoge EFE.
Esta investigación ha demostrado que las tortugas marinas pueden incluso aprender y recordar la firma magnética de una zona determinada y, cuando la encuentran, realizan una especie de baile.
Para ello, los investigadores alojaron varias tortugas bobas jóvenes (Caretta caretta) "en tanques en los que se recrearon firmas magnéticas relacionadas con lugares geográficos específicos", relata la agencia. Pasaron el mismo tiempo en dos campos magnéticos, pero sólo se alimentaron en uno.
"Cuando se encontraban en la zona asociada a la alimentación, las tortugas empezaban a bailar en señal de anticipación", indican, lo que fue la clave de que son capaces de aprender y distinguir entre distintos campos magnéticos.
Según los autores del estudio, "las dos herramientas distintas de magnetorrecepción también podrían estar presentes en la mayoría de las especies migratorias, como peces y aves", pero sería necesaria más investigación para determinarlo.
