El Ministerio de Consumo trabaja ya para prohibir la venta de bebidas azucaradas y energéticas, y de bollería industrial en centros escolares
No podrán consumirse ni ofrecerse aquellos alimentos que superen los cinco gramos de azúcares por porción y los que tengan altos contenidos en grasas o sal.

Lo ha confirmado El País esta mañana de lunes: el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 trabaja en una futura norma que incluirá medidas para prohibir la venta de productos azucarados, como la bollería industrial o y los refrescos, así como las bebidas energéticas, en los colegios e institutos.
Esta nueva legislación restringirá el acceso a los productos que incumplan criterios nutricionales saludables, atendiendo a los criterios establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) o la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA): los que superen los cinco gramos de azúcares por porción envasada y los que tengan altos contenidos en grasas o sal. Por supuesto, entre esos productos se incluyen también las bebidas energéticas que, según los nutricionistas, nunca han de consumir los menores de edad.
Además, el decreto también contemplará la prohibición de publicitar cualquier alimento insano en las máquinas de vending que se instalen en zonas de paso de niños y adolescentes.
Por otro lado, exigirá a los comedores no exceder el número de frituras, usar únicamente los tipos de aceites recomendados para ellas, así como aumentar el consumo de frutas, verduras y hortalizas.
Esta iniciativa también quiere reducir las preocupantes cifras que arrobaja un informe publicado hace unas semanas, en el que se informaba de que un tercio de los comedores escolares en España ofrecen demasiadas frituras y pocas verduras. Además, y según este mismo estudio, casi el 70% de las máquinas de vending de los centros de educación incumplen estos criterios nutricionales; y en las cafeterías el incumplimiento es aún mayor, 74,4%.
