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Los expertos hablan sin tapujos sobre el impacto de los imanes de nevera en tu factura de la luz

Los expertos hablan sin tapujos sobre el impacto de los imanes de nevera en tu factura de la luz 

Bosch, junto con otros especialistas del sector, ha decidido despejar las dudas.

La puerta de una nevera con imagen.Getty Images

En medio de la avalancha de mitos que circulan por internet, uno ha llamado especialmente la atención: la creencia de que los imanes decorativos en las puertas del refrigerador pueden aumentar el gasto energético del aparato. Esta afirmación ha sido ampliamente compartida en redes sociales y foros, pero ¿qué hay de cierto en ello? Bosch, junto con otros especialistas del sector, ha decidido despejar las dudas.

Estos pequeños objetos, usados comúnmente para sujetar notas o decorar, no representan ningún riesgo para el funcionamiento del refrigerador. Según Bosch, colocar unos cuantos imanes en la puerta no provoca fallos ni incrementa el consumo eléctrico. No obstante, advierten que un exceso podría dañar las bisagras o arañar la superficie, simplemente por el peso acumulado.

Endesa también ha intervenido en la discusión, afirmando que este mito es infundado. Aclaran que los imanes externos no atraviesan la carcasa del electrodoméstico ni afectan su sistema eléctrico o térmico. En la misma línea, la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) señala que el campo magnético generado por estos imanes es demasiado débil para interferir con el funcionamiento del refrigerador.

Desde LG se suman a las aclaraciones, asegurando que los imanes externos no influyen ni en el consumo de energía, ni en la vida útil del aparato, ni en la conservación de los alimentos.

 

Consejos para reducir el consumo:

Aunque los imanes no son un problema, hay otras prácticas cotidianas que sí pueden ayudar a reducir el gasto eléctrico:

  • Evita mantener la puerta del refrigerador abierta por mucho tiempo.
  • No ajustes la temperatura a niveles innecesariamente bajos.
  • Organiza los alimentos según su tipo para facilitar la circulación del aire.
  • Revisa con frecuencia el estado de las gomas de sellado de la puerta.
  • No introduzcas comida caliente directamente al refrigerador.
  • Realiza limpiezas y descongelaciones periódicas para evitar acumulación de hielo.
  • Usa envases adecuados que ayuden a conservar el frío, como vidrio o bolsas térmicas.

En resumen, puedes seguir usando tus imanes de nevera con tranquilidad. No afectarán tu factura eléctrica, y si realmente quieres ahorrar, enfócate en el uso eficiente del electrodoméstico y en su mantenimiento regular.

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