A la hora de criar a los hijos, los padres juegan un papel fundamental. Sin embargo, muchas veces se pasan por alto determinadas frases o comportamientos que pueden impactar a medio o largo plazo en la autoestima de los niños o incluso hacerles crecer inseguros.

El medio brasileño Crescer habló con Luciana Jamas, psicóloga y psicoterapeuta, Larissa Fonseca, miembro de la Sociedad Brasileña de Psicología, y Loretta Soares Campos, miembro de la Sociedad Brasileña de Pediatría y educadora de padres y reunió cuatro frases que pueden ser contraproducentes a la hora de transmitir seguridad a tus hijos.

En primer lugar, apuntan a la frase "deberías haberlo hecho mejor". Según las expertas consultadas, las críticas excesivas o exigirle perfeccionismo puede generar miedo y ansiedad a cometer errores, así como un sentimiento de fracaso. En su lugar, piden felicitarles y reconocerles su esfuerzo.

Otra de las cuatro frases a evitar es "mira qué bueno es tu amigo" lo que, según las psicólogas, "puede generar sentimientos de incompetencia y llevar a su hijo a creer que necesita ser alguien diferente para ser aceptado o amado". Esto puede derivar en pensamientos de insuficiencia que pueden llevar al pequeño a buscar constantemente validación externa. En su lugar, piden reforzar sus comportamientos positivos.

La tercera frase que recogen en el artículo es un "déjame hacerlo a mí", que sale de una excesiva protección de los padres y puede tener como consecuencia inseguridad entre los menores y que no desarrollen "la confianza en su propia capacidad para afrontar las dificultades". En lugar de esto, piden decirle frases como "prueba a hacerlo tú mismo, si necesitas ayuda aquí estoy".

Por último, piden no calificarle como "perezoso" o "torpe", ya que aunque pueden parecer inofensivos, puede "afectar a la forma en que se ve a sí mismo". En su lugar, piden recalcar sus aspectos positivos.

¡Mantente al día con El Huffpost! Sigue todas las noticias desde tu móvil en nuestra APP. Puedes descargarla tanto para Android como iOS.