Es probablemente uno de los imprescindibles de cada casa. Depende del hogar, hay uno específico para la ducha, otro para el pelo, para los platos, uno distinto para lavarse las manos y un largo etcétera. Ahora bien, también hay casos de personas que prefieren comprarlo natura o, incluso, hacerlo ellos o ellas mismas de manera artesanal. 

Para ello, se suelen emplear aceites vegetales, entre otros materiales que le dan la textura y la dote para limpiar lo que se desee. Desde el portal web lituano Juo Kingi han hablado de las bondades de este tipo de producto, que suele carecer de los aditivos sintéticos que sí que suelen tener los jabones con más químicos. 

Entre los beneficios que han señalado desde este sitio se encuentran la manera en la que cuida la piel. Al tratarse de un artículo de elaboración natural, lo convierte en un jabón adecuado para las personas con la piel especialmente sensible, además de que promueve el rejuvenecimiento de la misma. 

Siguiendo con la utilidad de este tipo de jabón para la piel, es también una buena opción para lavar las heridas más superficiales y menores, así como algunas erupciones cutáneas o las picaduras. Asimismo, hablan de usarlo para limpiar productos de higiene bucal, como el cepillo de dientes.

El mismo portal habla de que se trata de un producto con beneficios para el cabello. De nuevo, por el mismo motivo: porque es natural. Ayudaría a que este luzca más fortalecido, grueso y fuerte. Además, serviría para evitar la caspa. 

Instan, además, a usarlo para la limpieza de algunos puntos de la casa. De esta manera, se puede ahorrar en el uso, y por tanto compra, de los productos químicos específicos que se emplean para ello. 

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