No, el frío no existe, “solo estás sintiendo el calor que emana de ti”
Como tampoco existe la oscuridad.

Nadie te puede discutir que lo sientes: en la cara o en los pies te hace tiritar y te incomoda o te paraliza. Ahora bien, el frío, según la ciencia, según la física, no es real, no existe. Al menos como sí existe el calor.
En términos científicos el frío se define en sí mismo como ausencia de calor al que sí define la física como una forma de energía que se transfiere, por conducción, convección y radiación, debido a diferencias de temperatura.
El ejemplo más claro de ello es que si sostenemos una taza de té caliente, nuestras manos también entran en calor. En cambio, si tocamos la nieve, son nuestras manos las que lo pierden para transferirlo a ese agua helada, que puede llegar a deshacerse.
En definitiva: el frío es simplemente la ausencia de calor. Es lo mismo que hablar de la oscuridad: no existe en sí mismo, es solo ausencia de luz. "Puedes encender una lámpara para generar luz, pero no puedes encender algo para generar oscuridad. Del mismo modo, es posible añadir calor a un objeto, pero no hay forma de “añadirle frío”. Lo único que se puede hacer es quitarle el calor", aclaran en la revista National Geographic.