¿Por qué las palentinas no se tienen que arrodillar ante el rey?
Hay que remontarse al siglo XIV.

La historia de España es tan amplia que hay muchas tradiciones que se mantienen hoy día y que se remontan siglos atrás. Es el caso de la de las mujeres palentinas, de las que se les dice que no tienen que arrodillarse ante un rey.
Esto se remonta al siglo XIV y al papel que tuvieron las mujeres en un intento de conquista a la ciudad castellana, tal y como contó el historiador Javier Santamarta en su libro Siempre estuvieron ellas (Edaf) y recoge El País, concretamente a la batalla contra el duque de Lancaster en mayo de 1388.
Todos los hombres de la ciudad habían sido reclutados por Juan I de Castilla, por lo que las palentinas fueron las encargadas de defender la ciudad ante la risa de sus enemigos, recuerda Santamarta. "Aceite hirviendo convertido en cascadas que abrasan a los soldados que más se aproximan. Escalas rechazadas por mujeres, que las empujan con las horcas que tienen. Cuerdas, cortadas con hachas", apunta el escritor.
Las palentinas se alzaron victoriosas y, para su reconocimiento, el monarca les otorgó el conocido como "derecho de toca" y "de este modo no tenían ya que inclinarse ante el rey". Además, se les otorgó una cinta dorada y roja para sus tocados, que se mantiene en el traje tradicional palentino.
