
berlín














Querido Berlín, no puedes morir ahora
El miedo que te cierra la mente no conoce fronteras. El miedo a los mercadillos de Navidad. El miedo a todos los que hablan árabe. El miedo a ir en metro sola por la noche con un pañuelo en la cabeza, el miedo a vivir, el miedo a morir.





