No sé dónde ni cuándo leí que los personajes ilustres son siempre identificados por su apellido. Aún más restringido es el círculo de artistas a quienes sólo conocemos por el nombre. Muchos son los llamados, pero pocos los elegidos. Para mí, uno de ellos es Gonzalo Suárez, un nombre propio que se ha abierto un hueco en la historia del cine.
El escritor John Berger explicaba que la fotografía es memoria y el cine aventura, que uno es retrospectiva y el otro anticipador, que ante una fotografía buscas lo que estaba ahí y ante una película esperas qué viene a continuación. Por eso fotografiar el rodaje y el making off de un cortometraje implica la inquietante alteración del orden natural de las cosas.