Un mando militar fiel al presidente Arce pero destituido, los cuarteles en calma, las comunicaciones intantas. ¿Ha sido asonada o autogolpe? Sólo hay una conclusión clara: la crisis del país sigue intacta, mientras su mandatario se blinda con apoyos.
Aún así, el exmandatario suspende las "movilizaciones convocadas" tras retomarse "la calma" en el país, con la detención del cabecilla militar de la asonada.
Al derechista se le acusa de "terrorismo" por alentar la crisis que llevó al derrocamiento del expresidente Morales. Sus simpatizantes bloquean el aeropuerto y queman oficinas.
Los gobiernos más autoritarios del mundo han utilizado la pandemia como cortina de humo para intensificar y ampliar sus poderes de censura a los disidentes e impedir la difusión libre de la información.