No hay tema en nuestra cultura que esté tan dominado por los mitos y las equivocaciones como las drogas. Nos da miedo hablar de ellas. Nos sentimos tentados de decir las típicas frases de siempre: "Hay que decir que no" y sus demás variantes.
Todos tenemos reglas de consumo de marihuana. Algunos no conducimos, no vamos a trabajar o no visitamos a nuestra madre cuando acabamos de fumar. Si empiezas a hacer excepciones (son sólo un par de kilómetros, es viernes y salgo antes, no se va a dar cuenta...), quizá significa que estás perdiendo el control.