Cambiando la marcha: el día que la revuelta paralizó La Vuelta
5 datos que explican cómo las protestas han puesto fin a una competición de todo menos deportiva.

Palestina ocupa el centro de Madrid. Lo que este domingo debía ser un paseo triunfal por las calles de Madrid para cerrar la 80.ª edición de la Vuelta Ciclista a España se convirtió en una especie de tour improvisado lleno de obstáculos y banderas de Palestina para los deportistas. La etapa final fue cancelada de forma (in)esperada a apenas 56 kilómetros de la meta, después de que manifestantes propalestinos ocuparan las calzadas, lanzaran vallas y botellas, y obligaran a la policía a desplegar cargas antidisturbios.
La Vuelta, derrotada
El pelotón, que esperaba atravesar la capital para celebrar el final de la ronda española, se encontró con tramos cortados, calles tomadas y gritos de "¡Palestina libre!". Tras varios intentos fallidos de reanudar la marcha, los ciclistas decidieron esperar pacientemente mientras eran escoltados por la policía hacia sus vehículos y hoteles. Después, la organización anunció finalmente la cancelación de la etapa y de la ceremonia de podio, dejando a Jonas Vingegaard sin su momento de gloria sobre el podio.
"Esta vuelta la gana Palestina"
Desde primeras horas de la tarde, Madrid se había llenado de concentraciones y cánticos: "¡No es una guerra, es un genocidio!", coreaban los manifestantes mientras los agentes revisaban con lupa los palos de las banderas por si escondían algún objeto peligroso. El recorrido, que habitualmente es un paseo festivo por la ciudad, se transformó en un improvisado circuito de adrenalina política, con 1.100 agentes de Policía Nacional y 400 de la Guardia Civil desplegados.
Frases como "esta vuelta la gana Palestina" son algunos ejemplos de lo que se ha coreado en las protestas. "Lo hemos conseguido, les hemos jodido la vuelta", ha señalado a EFE uno de los participantes en las protestas, quien ha asegurado que el objetivo final era la cancelación de la etapa, hito que han logrado finalmente.
"Vosotros sionistas sois los terroristas", "No es una guerra, es un genocidio", "La neutralidad es complicidad" son algunas de las frases que se han podido escuchar durante las protestas.
Sánchez y la izquierda, con Palestina
Una de las cuestiones que más ha criticado la ultraderecha española, así como Israel, han sido las palabras de Sánchez, quien puso el foco este domingo en la masacre perpetrada por Israel en Gaza durante un mitin celebrado en Málaga, que marcó el inicio de la precampaña del PSOE para las elecciones andaluzas de 2026.
En su intervención, Sánchez mostró su apoyo y "admiración" a quienes participaron en las protestas contra el genocidio en Palestina y la presencia del equipo Israel-Pro Tech en la Vuelta a España. "España brilla como ejemplo y con orgullo. Da un paso al frente en la defensa de los derechos humanos. Nos ponemos de acuerdo en una causa justa, como son los derechos humanos. ¡Viva el pueblo español!", afirmó Sánchez ante los asistentes, entre vítores, aplausos y banderas palestinas.
Israel, Ayuso, Almeida y la ultraderecha: enfadados con las protestas
Las protestas no han sentado nada bien ni a la derecha y ultraderecha española, como a los propios gobernantes de Israel, quienes no han tardado en cargar contra las acciones de los manifestantes como a las palabras del presidente español. El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Gideon Saar, ha criticado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por según él "animar" a los manifestantes propalestinos antes de la cancelación de la última etapa de La Vuelta Ciclista.
"Hace unos días, el presidente del Gobierno español lamentó no tener una bomba atómica para detener a Israel. Hoy, animó a los manifestantes a salir a la calle", ha afirmado Saar en su cuenta en la red social X. Según este, "la turba propalestina escuchó los mensajes incitadores y atacó La Vuelta ciclista". "Se ha cancelado el evento deportivo que siempre había sido motivo de orgullo para España. Sánchez y su Gobierno: ¡vergüenza para España!", ha destacado en la red social.
También se han pronunciado Isabel Díaz Ayuso y José Luis Almeida. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha asegurado que "cuando el presidente de la nación jalea el boicot contra la Vuelta Ciclista a España, en su propia capital, se convierte en responsable directo de cada altercado que se produzca". Mientras tanto, Almeida, en su línea, ha pedido al presidente del Gobierno y el ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, que condenen "de manera firme e indubitada" los "actos violentos" de hoy.
"Exigimos que el presidente del Gobierno y el ministro de Interior condenen de manera firme e indubitada a los violentos, que condenen de manera firme e indubitada la violencia en nuestras calles y que, por tanto, no tengamos que volver a vivir este tipo de acciones que desgraciadamente en España tenemos el recuerdo de lo que ha sucedido en las últimas décadas", ha advertido.
100.000 asistentes condenan el "genocidio" de Israel en una jornada "sin incidentes graves"
A pesar de los disturbios y de las cargas policiales, el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, ha defendido que los incidentes se resolvieron "sin incidentes graves" y que tan solo dos personas fueron detenidas durante los disturbios, aunque es cierto que ha habido al menos 22 policías heridos, tal y como recoge EFE.
Finalmente, Martín destacó que la inmensa mayoría de los asistentes, cifrados por el Gobierno en 100.000 personas, acudieron de forma pacífica, y elogió su actuación por haber "sido ejemplo de dignidad enarbolando alto y fuerte la bandera de la paz" y enviar "al mundo un inmenso mensaje de solidaridad, de humanidad y de empatía con el sufrimiento del pueblo palestino".
