Encuentra por sorpresa 6.000 euros en efectivo en un paquete de Amazon y su gesto inmediato es para enmarcar
Casi nadie reaccionaría así.

Una historia tan sorprendente como ejemplar ha sacudido la localidad italiana de Spilamberto, en la provincia de Módena. Un empleado del centro logístico que Amazon abrió en la zona en 2021 encontró, en febrero de este año, un paquete devuelto que contenía 6.325 euros en billetes. Sin pensárselo dos veces, alertó a su superior inmediato, quien activó el protocolo y avisó a las autoridades locales.
Lo que pudo haber terminado en manos equivocadas acabó en las arcas municipales gracias a un gesto de absoluta integridad. Tras no aparecer ningún reclamante en el plazo legal de 12 meses, Amazon —que había pasado a ser oficialmente la propietaria del dinero— tomó una decisión inesperada: donar la suma íntegra al Ayuntamiento de Spilamberto.
La información, adelantada por La Gazzetta di Modena, detalla que el hallazgo se produjo durante la rutina de clasificación de devoluciones en el centro logístico. El paquete no tenía signos visibles que lo distinguieran del resto, pero en su interior ocultaba un fajo de billetes por valor de más de 6.000 euros. A día de hoy, se desconoce cómo acabó allí.
Aunque las autoridades no descartan un posible error o incluso un intento de encubrir actividades ilícitas, lo cierto es que las pesquisas de los Carabineros no han logrado identificar al remitente ni al destinatario original del dinero. Lo único seguro es que nadie reclamó el contenido durante el periodo legal estipulado.
Una donación sin condiciones
La respuesta de Amazon, lejos de la indiferencia, fue canalizar esos fondos hacia la comunidad local. Así lo confirmó Marcello Vecchi, concejal de Actividades Productivas del municipio, quien recibió la propuesta de la multinacional. “Pregunté si querían que se destinara a algo en concreto, pero me dijeron que lo dejaban a nuestra elección. Hemos decidido invertirlo en el mantenimiento de zonas verdes”, explicó.
Para un pequeño municipio como Spilamberto, esta inyección inesperada de fondos representa mucho más que una anécdota: es una oportunidad tangible de mejora urbana. Y, al mismo tiempo, una muestra de cómo la honestidad individual puede generar beneficios colectivos.
En tiempos donde la desconfianza y el escepticismo tiñen muchas noticias, esta historia pone en el centro un acto simple, pero poderoso: elegir lo correcto cuando nadie está mirando. Un gesto que, aunque anónimo, ha dejado huella. Y que ahora se transformará en árboles, bancos, y espacios para que los vecinos disfruten. Todo gracias a un billete —y una conciencia limpia.
