Estas son las diferencias entre la llave francesa e inglesa
La llave francesa es preferida en trabajos de fontanería, mantenimiento doméstico y reparaciones ligeras, gracias a su diseño más delgado y maniobrable.

Una de las diferencias más notables entre la llave francesa y la inglesa radica en su mecanismo de ajuste. La llave francesa, también conocida como “llave ajustable” en algunos países de habla hispana, posee una rueda de ajuste situada en la parte móvil de la mandíbula, que permite modificar la apertura de forma precisa. Esta rueda se encuentra en el mismo lado que la mandíbula móvil, lo que facilita su manipulación con una sola mano y permite un ajuste más intuitivo.
Por el contrario, la llave inglesa —cuyo nombre en inglés es “adjustable spanner” o “monkey wrench” dependiendo del diseño— presenta una disposición distinta. En muchos modelos, la rueda de ajuste se encuentra en el lado opuesto a la mandíbula móvil, lo que puede dificultar su uso en espacios reducidos o cuando se requiere rapidez. Además, la llave inglesa tradicional suele tener un cuerpo más robusto y pesado, lo que la hace más adecuada para trabajos de mayor exigencia mecánica.
El origen de ambas herramientas también marca una diferencia significativa. La llave inglesa fue patentada en el siglo XIX por el ingeniero británico Richard Clyburn, y su diseño fue concebido para ofrecer una alternativa versátil a las llaves fijas. En cambio, la llave francesa, aunque también data del siglo XIX, fue desarrollada por el ingeniero sueco Johan Petter Johansson, quien introdujo mejoras clave en el diseño ajustable, dando lugar a la herramienta que hoy conocemos.
En cuanto a su uso, la llave francesa es preferida en trabajos de fontanería, mantenimiento doméstico y reparaciones ligeras, gracias a su diseño más delgado y maniobrable. Su capacidad para ajustarse con precisión la convierte en una herramienta ideal para tareas que requieren cuidado y delicadeza. Por su parte, la llave inglesa es comúnmente utilizada en entornos industriales, automotrices y de construcción, donde se necesita una herramienta más resistente y capaz de soportar mayores niveles de torque.