Intenta arreglar la fuga de su Lamborghini con un apaño y el momento McGyver le sale por 19.000 euros en daños
Lo barato le salió muy caro.

En muchas ocasiones, lo barato sale caro. Y si en lo que se intenta ahorrar costes es en la reparación de un coche de alta gama como un Lamborghini, puede suceder que el precio de solucionar un arreglo defectuoso se acabe disparando.
Ello es lo que le ha ocurrido al propietario de un Lamborghini Huracán V10 que compró de segunda mano. Poco tiempo después de la adquisición, el vehículo sufrió un problema de válvulas.
Para tratar de solucionarlo, el dueño del coche desmontó la culata con un amigo, la reparó y luego intentó volver a montarla en su garaje. Sin embargo, los intentos de arrancar el Lamborghini fueron fallidos, por lo que finalmente tuvo que recurrir al taller estadounidense DC Motorworks.
Tal y como recoge el sitio web francés BMW-Actu, en el taller el diagnóstico fue que el motor del Lamborghini Huracán V10 estaba gravemente dañado por el uso excesivo de silicona en la junta de la culata.
De esa forma, el momento McGyver del propietario del coche con la silicona provocó que los canales de aceite se obstruyeran, los árboles de levas quedaran corroídos y toda la culata resultara seriamente dañada.
Desde el citado sitio web especializado en automóviles explican que "el mayor problema es que los cojinetes del árbol de levas no son reemplazables; todo el conjunto se mecaniza en fábrica. Una vez dañado, es imposible repararlo. Al final, lo que parecía un pequeño error resultó ser irreparable y condenó a la pieza por completo".
Finalmente, la reparación de 'su reparación' le costó al dueño del Lamborghini casi 19.000 euros entre la sustitución de culatas, árboles de levas, engranajes de distribución… y el tiempo dedicado por el taller al desmontaje, inspección, montaje y pruebas.