Los canarios dejan claro que esta receta es sello de identidad de las islas
Esta evolución del plato demuestra su versatilidad y su capacidad para adaptarse a nuevas tendencias culinarias.

Las papas arrugadas son un plato tradicional de las Islas Canarias que se prepara con papas pequeñas, preferiblemente de la variedad "papa bonita", que se cuecen con abundante sal y se sirven con mojo, una salsa típica de la región. Este plato, que en su simplicidad esconde una riqueza de sabores, ha sido durante siglos una parte integral de la dieta canaria.
La preparación de las papas arrugadas es un proceso que refleja la sabiduría popular y la adaptación a los recursos disponibles en las islas. Las papas se cuecen con su piel en agua con sal, hasta que el agua se evapora y las papas quedan con una textura arrugada y una capa de sal que potencia su sabor. Este método de cocción, que conserva los nutrientes y el sabor de las papas, es un ejemplo de cómo la cocina tradicional puede ser saludable y deliciosa.
El mojo, que acompaña a las papas arrugadas, es una salsa que puede ser roja o verde, dependiendo de los ingredientes utilizados. El mojo rojo, hecho con pimientos, ajo, comino y aceite, tiene un sabor intenso y picante, mientras que el mojo verde, preparado con cilantro o perejil, ofrece un sabor más fresco y suave. Ambas variantes de mojo son esenciales en la gastronomía canaria y complementan perfectamente el sabor de las papas arrugadas.
Los canarios consideran las papas arrugadas como un símbolo de su identidad cultural por varias razones. En primer lugar, este plato es una representación de la historia agrícola de las islas, donde la papa ha sido un cultivo fundamental desde su introducción en el siglo XVI. Además, las papas arrugadas son un ejemplo de cómo la cocina canaria ha sabido aprovechar los recursos locales y adaptarse a las condiciones del entorno.
La defensa de las papas arrugadas como símbolo de identidad también se manifiesta en la promoción de este plato en eventos culturales y turísticos. Las ferias gastronómicas, los festivales y las celebraciones locales suelen incluir las papas arrugadas como uno de los platos estrella, mostrando a visitantes y turistas la riqueza de la cocina canaria. Esta promoción no solo ayuda a preservar la tradición culinaria, sino que también contribuye a la economía local, atrayendo a turistas interesados en la gastronomía.
Además, las papas arrugadas han encontrado su lugar en la alta cocina, con chefs canarios y de otras partes del mundo que han incorporado este plato en sus menús, reinterpretándolo y dándole un toque moderno sin perder su esencia. Esta evolución del plato demuestra su versatilidad y su capacidad para adaptarse a nuevas tendencias culinarias, mientras sigue siendo un símbolo de la identidad canaria.
La importancia de las papas arrugadas en la cultura canaria también se refleja en la literatura y el arte. Poetas, escritores y artistas han encontrado inspiración en este plato, utilizando las papas arrugadas como metáfora de la resistencia y la adaptación de los canarios a su entorno. Este simbolismo refuerza la conexión entre la gastronomía y la identidad cultural, mostrando cómo un plato puede ser mucho más que una simple comida.