Se activa zona de riesgo por garrapatas y los vecinos toman medidas: "Como tanto ajo que no podrán sacarme sangre"
Solo en el último mes se han notificado casi 50.000 casos, según notificaron las autoridades sanitarias.

El verano ha traído consigo un repunte inusual en la actividad de las garrapatas en Finlandia. Según el servicio Punkkilive, gestionado por la Universidad de Turku en colaboración con la farmacéutica Pfizer, ya se han registrado cerca de 90.000 avistamientos en todo el país, una cifra muy superior a los poco más de 60.000 reportes que se contabilizaron en 2024.
Solo en el último mes se han notificado casi 50.000 casos, muchos de ellos en la capital y su entorno, especialmente en Espoo, donde la proliferación de garrapatas ha disparado la preocupación entre los vecinos. Punkkilive permite a los ciudadanos informar sobre encuentros con estos parásitos y ofrece a los investigadores una valiosa herramienta para estudiar su distribución.
Frente a esta situación, las autoridades sanitarias han reforzado el programa de vacunación gratuita contra la encefalitis transmitida por garrapatas (TBE) en varias zonas de Espoo. Desde este año, se han incorporado los distritos de Kurttila y Vanttila, que se suman a Suvisaaristo, incluida ya desde la primavera de 2023. Todos los residentes mayores de tres años que vivan de forma permanente en estas áreas, así como quienes pasen largas estancias, tienen derecho a recibir la vacuna sin coste.
El creciente número de garrapatas también ha provocado una mayor concienciación entre los dueños de mascotas, que han comenzado a adoptar medidas preventivas para proteger a sus animales. Desde collares hasta soluciones tópicas y comprimidos, las opciones son variadas. La mayoría de los entrevistados por Helsingin Sanomat en la zona de Vanttila aseguran haber vacunado tanto a sus perros como a sus familias.
Lauri Kuljus, por ejemplo, recurre a un repelente para su perro Sannu, mientras que Hanna von Plato, vecina de Kurttila, confía en un collar que protege a su cocker spaniel Alvin durante seis meses. "Después de encontrar tres garrapatas en la cabeza de mi hija, a pesar de que el patio está asfaltado, me volví mucho más cuidadosa", relata.
Von Plato recuerda también el caso del perro de un vecino en Kauklahti, que tuvo que ser sacrificado tras mostrar síntomas de parálisis atribuida a la enfermedad de Lyme. “Las pruebas confirmaron que fue a causa de una picadura de garrapata”.
Anna Grönmark, habitual del parque canino local, conoce de primera mano los riesgos: ha sufrido tanto la enfermedad de Lyme como encefalitis por garrapatas. "Tuve un dolor de cabeza tan fuerte que no podía moverme a cinco metros del baño. Acabé hospitalizada", explica. Sin tratamiento específico para la encefalitis, los casos más graves pueden requerir hospitalización. "Sin repelentes, probablemente encontraría entre 40 y 50 garrapatas al día. Es una locura".
No basta con vacunarse
Aunque la vacuna contra la TBE protege de esa forma de encefalitis viral, no impide que las garrapatas se adhieran ni protege contra otras enfermedades, como la enfermedad de Lyme, que es mucho más común y se trata con antibióticos. Por ello, los expertos insisten en la necesidad de combinar la vacunación con medidas de protección física.
"Uso una solución tópica para proteger a Luna y Nala", cuenta Saija Sillanpää, que pasea a sus perras por la zona residencial de Vanttila. Asegura que en los últimos años la cantidad de garrapatas ha aumentado notablemente. "A veces las encuentro en el suelo, incluso antes de que se adhieran. Tenemos un sofá blanco en casa, así que se ven fácilmente".
Aunque bromea con que come tanto ajo que no pueden sacarle sangre —en referencia a la creencia popular de que el ajo repele a estos parásitos—, advierte que este alimento es tóxico para los perros y no debe usarse como método de prevención.
El Instituto Nacional de Salud y Bienestar de Finlandia recuerda que la vacunación no sustituye otras formas de protección. Entre las recomendaciones básicas para prevenir picaduras destacan:
- Usar ropa de colores claros, de manga larga y pantalones metidos dentro de los calcetines.
- Optar por calzado cerrado y botas altas al caminar por áreas con vegetación.
- Aplicar repelente de insectos en las zonas expuestas de la piel.
- Revisar el cuerpo y la ropa al regresar del exterior, así como a las mascotas.
La vigilancia sigue siendo clave: aunque muchas garrapatas pasen desapercibidas, sus efectos pueden ser graves. Y este año, más que nunca, Finlandia parece estar en el centro de su actividad.
