Adiós al gran problema con las botellas de plástico: investigadores dan con un proceso que podría transformar su papel final
La contaminación de los océanos por la presencia de plásticos continúa siendo una de las mayores crisis medioambientales de nuestro siglo.
La contaminación de los océanos por la presencia de plásticos continúa siendo una de las mayores crisis medioambientales de nuestro siglo por los daños y los efectos provocados en la flora y la fauna submarina. Son muchos los estudios científicos que estudian el tipo de consecuencias que tienen en el ecosistema o en la salud humana. Ahora, una investigación ha transformado residuos plásticos en moléculas de alto valor.
El estudio, llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Insubria y publicado en la prestigiosa revista ACS Catalysis, describe un método biotecnológico avanzado que convierte el PET (tereftalato de polietileno) procedente de botellas de plástico en aminoácidos puros de alto valor comercial, según ha detallado el medio Varese News.
El resultado de la investigación supone "un logro pionero en la bioeconomía circular", según ha destacado. Esta demuestra que los residuos y contaminantes pueden transformarse en compuestos valiosos gracias a sistemas enzimáticos y microbianos diseñados y a procesos sostenibles, ha agregado.
El estudio se llevó a cabo en el laboratorio The Protein Factory 2.0 por la profesora Elena Rosini bajo la coordinación del profesor Loredano Pollegioni , delegado universitario para la Investigación e Innovación Tecnológica y director del proyecto ProPla, financiado por la Fundación Cariplo.
Hace un año un estudio de aprendizaje automático publicado en la revista especializada Science predijo que, si no se toman medidas, los desechos plásticos a nivel mundial podrían duplicarse para el año 2050, alcanzando los 121 millones de toneladas métricas. Al mismo tiempo, proyectaron que las emisiones anuales de gases de efecto invernadero del sistema plástico global aumenten un 37% durante el mismo período.
En este contexto, la investigación demuestra que es posible no solo reducir la contaminación por plástico, sino también transformarla en un recurso valioso, como los aminoácidos L-alanina y D-alanina, cuyo mercado global se estima en 146 millones de dólares y 153 millones de dólares, respectivamente, en 2024, y que está creciendo rápidamente.
El equipo de investigadores desarrolló así una "cadena enzimática" compuesta por doce enzimas de cuatro microorganismos diferentes, capaz de degradar el PET en sus monómeros y convertirlos, a través de pasos sucesivos, en el aminoácido alanina.
"Este es un ejemplo concreto de valorización enzimática del plástico", afirmó la profesora Rosini. "Hemos logrado la conversión total del PET en compuestos de alto valor mediante un proceso completamente ecológico. Esto demuestra que el plástico puede convertirse en un recurso, no solo en un desecho", subrayó.
"Este estudio abre el camino a una nueva generación de procesos biotecnológicos capaces no solo de eliminar residuos, sino también de producir moléculas de interés para aplicaciones farmacéuticas, cosméticas y alimentarias", destacó el profesor Pollegioni.