En Reino Unido describen a Mazón con dos simples y contundentes términos tras su dimisión
El diario británico 'The Guardian' da pinceladas de lo que muchos han dicho hasta ahora.

El diario británico The Guardian, fundado en Manchester en 1821 por un grupo de empresarios liderados por John Edwartd Taylor, se ha hecho eco de la reciente dimisión de Carlos Mazón, que hasta este lunes ejercía como presidente de la Generalitat Valenciana. Destaca especialmente lo tarde que ha dejado su cargo tras la gestión que tuvo con la terrible DANA que dejó 229 fallecidos en la provincia de Valencia hace ya un año.
El titular del extenso artículo que le han dedicado en el citado periódico ya lo dice todo y, a su vez, comparte lo que muchos han opinado durante este año en el que seguía en su cargo: "El presidente de Valencia, Carlos Mazón, dimite por su pésima gestión de las mortales inundaciones".
Son precisamente los dos términos más utilizados en su análisis, "pésima gestión". Pero llama la atención lo que han escrito en la primera línea, por cómo lo han descrito: "Carlos Mazón, el asediado presidente de la región oriental española de Valencia, ha cedido a la furia pública y a la presión política dimitiendo por su pésima gestión de las mortales inundaciones".
"Su obstinada negativa a dimitir..."
El diario británico ha destacado una particular frase utilizada en una de las tantas manifestaciones convocadas contra Mazón, de nuevo, por su "obstinada negativa a dimitir": "Lodo en nuestras manos, sangre en las suyas".
Además, destacan un contundente párrafo que demuestra su mala imagen en la prensa internacional: "Mazón, miembro del conservador PP, se mantuvo en el cargo a pesar de los llamados a que renunciara después de que se supo que pasó más de tres horas almorzando con una periodista mientras las inundaciones azotaban la región y la gente se ahogaba".
"Mazón cedió ante lo inevitable y anunció que abandonaría la presidencia regional", aunque les sorprende que no informara de si convocaría elecciones anticipadas, si renunciaría a su cargo de diputado o quién sería "su sucesor".
El funeral de Estado
En The Guardian han destacado que "el enfado por la respuesta de su gobierno a la crisis—sobre todo por el hecho de que no se enviara una alerta de emergencia a los teléfonos móviles de la gente hasta después de las 8 de la noche del día de las inundaciones— llegó a su punto álgido en el funeral de Estado".
"Fue recibido con gritos de 'asesino', 'cobarde' y 'deberías estar en la cárcel", han añadido, defendiendo que fue a partir de ahí ser la gota que derramó el vaso y provocó que, tras un año, Carlos Mazón dimitiera de su cargo.
