Pide azúcar para el café y la insólita respuesta del camarero le acaba costando la hoja de reclamaciones
El debate está servido.

La insólita respuesta que el camarero de una cafetería le ha dado a un cliente después de que éste le pidiese un sobre de azúcar para el café le ha acabado costando la hoja de reclamaciones y ha provocado un intenso debate.
"Le pedí azúcar a un camarero y se enfadó. Han abierto un sitio nuevo de café en mi pueblo, entonces fui allí y se supone que era el mejor café del mundo. Venía directamente de importación y tal y entonces decidí pedirme un café", relata el usuario de TikTok @sirious18.
"De hecho me pedí el café más caro de la carta, no sé si eran cinco o seis euros el café solo, pero cuando lo probé estaba excesivamente amargo, así que le pedí al camarero que me trajera un sobrecito de azúcar y él se negó rotundamente", cuenta el cliente.
"Total, que tuve hasta que pedir la hoja de reclamaciones. Me decía que en el establecimiento no había azúcar y que el café se tenía que tomar sin azúcar", afirma antes de subrayar que, para él, "por muy bueno que sea el café, pues si me gusta con azúcar porque no me gusta el amargor, pues habrá que echarle azúcar".
"Además, cuanto más azúcar mejor, más rico sabe", zanja el su vídeo, que ha provocado reacciones de todo tipo: hay quien justifica al camarero y quien cree que su respuesta estuvo totalmente fuera de lugar.
"Entonces discúlpame pero no te gusta el café, te gusta el toque agrio del azúcar al mezclarse con el café. Es como los que dicen que les gusta el café, pero que se tienen que poner un poco de leche... Todo lo que sea disfrazar el sabor original, es que no te gusta ese sabor. No voy a entrar en las calidades en general de los cafés de consumo de bares, cafeterías, supermercados... Y no, el café bueno ni es amargo ni es oscuro", dice una persona.
Otro usuario es algo más moderado: "Al café realmente no se le echa azúcar, otra cosa es como le guste a cada uno porque aquí en España nos acostumbraron así y el paladar está hecho a eso pero la realidad es que no lleva".
Otras personas van en un sentido totalmente distinto: "Qué manía con decir a los demás cómo se bebe o come algo!! Yo no echo azúcar pero cada uno que lo tome como quiera. Es como el punto de la carne".
