Diego García, Premio Emprendedor 2013: "Nuestra sociedad ha sido conformista y servil"

Diego García, Premio Emprendedor 2013: "Nuestra sociedad ha sido conformista y servil"

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Inteligencia artificial para crear robots que sean capaces de sentir, que se asemejen lo más posible al ser humano para ser incorporados a la vida cotidiana. Esa idea, y su transformación en el proyecto 'Aisoy Robotics', ha llevado a Diego García y a los otros cinco fundadores de la empresa a ganar el Premio Emprendedores 2013, que organiza la Fundación Everis y que esta semana entregó el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria.

García, que tiene 35 años y es ingeniero de telecomunicaciones por la Universidad Politécnica de Valencia, reconoce que conseguir el galardón supone estar más cerca de su sueño: "Democratizar la robótica social". Eso y los 60.000 euros que lleva aparejado el premio, que en momentos en los que conseguir financiación es casi una proeza da un empujón muy importante a la compañía.

"Lo más complicado a la hora de poner en marcha el proyecto fue conseguir reunir y consolidar al equipo humano que hiciera realidad la idea y la dotara de solvencia en todas sus dimensiones, técnica y financiera", explica García en conversación con El Huffington Post. Un dato da idea de la magnitud de la tarea: montar una empresa en España es más difícil que en países como Uzbekistán, Zambia o Sudán del Sur, según un reciente informe del Banco Mundial.

El Premio Emprendedor 2013 tiene claro el porqué de esa situación: "No hemos destacado especialmente por nuestro carácter emprendedor. Hemos tenido, y tenemos, un miedo atroz al fracaso y nos repele el riesgo, tratamos por todos los medios de encontrar un lugar seguro donde acomodarnos".

Al contrario, explica, emprender es sobre todo asumir riesgos y ser capaz de convivir con la incertidumbre. "Estos valores, más que potenciarse, se han frenado en nuestra sociedad, tradicionalmente conformista y servil".

"NO SIRVEN PARCHES PUNTUALES"

En cualquier caso, García reconoce que sirve de poco que los españoles sean emprendedores si lo que él denomina "condiciones ambientales" no favorecen que esa chispa se propague. En este contexto, cree que la ley de Emprendedores, tan cacareada por el Gobierno, es un paso adelante pero que servirá de poco porque es una medida "cortoplacista".

Entre otras cosas, esa ley recoge la creación de un régimen especial de criterio de caja en el IVA para autónomos y pymes que les permitirá evitar tener que ingresar este impuesto hasta que hayan cobrado las facturas. Otra de las medidas es la disminución del 20% en los rendimientos netos de la declaración del IRPF y una exención completa de este impuesto cuando se capitalice la prestación por desempleo.

"De poco sirven parches puntuales si no se cuida el futuro y se dedican más recursos a la educación como una manera de construir una sociedad formada, responsable y generadora de valor, en lugar de un país de servicios y mano de obra barata", lamenta García, quien cree que el Estado debería fomentar la integración de los recién titulados en empresas nuevas "asumiendo los costes laborales durante el primer año, como sucede en el Norte de Europa".

"EMPRENDER ES UN PROCESO SOCIAL"

En este sentido, el cofundador de 'Aisoy Robotics' subraya que emprender es "un proceso social" y no algo de una sola persona o equipo. "El discurso de 'todos somos emprendedores' puede tener una doble lectura: parece estar responsabilizando a cada uno de nosotros de nuestra situación particular, como que el que no tiene una empresa es porque no quiere, y no es tan simple", se queja.

Por eso, da un consejo a quien crea que tiene una idea innovadora: ir poco a poco. "Que la haga pública en su círculo cercano para validar que realmente responde a una necesidad de la sociedad". El siguiente paso sería, según indica García, desarrollar un prototipo y presentarlo en una plataforma de crowdfunding. "Es una manera rápida y no dolorosa de sondear el interés del mercado", aclara.

Y, sobre todo, no tener miedo al fracaso, algo que en otros lugares puede llegar a ser positivo: "En Japón, aquel que ha fracasado alguna vez tiene un plus de credibilidad, porque se le presupone haber aprendido de los errores."

MOSTRAR BIOGRAFíA

Soy subdirector en El HuffPost España. Junto a todo el equipo, trato de que el medio conserve la esencia que le caracteriza desde su fundación: escuchar a la gente, no importa desde donde nos lea, apostando siempre por nuevos formatos y por el contenido que demanda la calle, tratado siempre con la máxima rigurosidad.

 

Sobre qué temas escribo

Me centro en virales, cultura digital y tendencias sociales, con especial atención a cómo ciertos fenómenos aparentemente ligeros abren la puerta a debates más profundos. Por ejemplo, el reportaje con el que se dio a conocer Alfredo Corell: “La charla de un profesor de universidad que puso en pie a todo un auditorio”. En aquella época, Corell era un desconocido para el gran público, pero a partir de ese artículo, que tuvo cientos de miles de lectores, su popularidad fue creciendo hasta convertirse en uno de los científicos más respetados de España, con galardones como el I Premio CSIC-Fundación BBVA de Comunicación Científica.

 

Mi trayectoria

Nací en Valladolid, estudié Periodismo en la Universidad de esa misma ciudad y fui becario en 'El Día de Valladolid'. Luego dejé mi tierra para cursar el Máster de Periodismo de la Universidad Autónoma de Madrid y trabajé un año en 'El País' antes de entrar a formar parte en 2012 del equipo de 'El HuffPost España'. Aquí he sido redactor de hard news, responsable de fin de semana, jefe de la sección de virales y, ahora, subdirector. Entre medias, durante un año fui jefe de redes sociales y multidistribución de contenidos en 'Los40'.

 

Una de mis aficiones es escribir ficción y he sido finalista en dos concursos literarios: el I Concurso de Microrrelatos 5’ y el Premio Internacional de Microtextos Garzón Céspedes.

 


 

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