La confesión de la madre de Marc Márquez: “No cenábamos para poder comprarles botas a nuestros hijos”

La confesión de la madre de Marc Márquez: “No cenábamos para poder comprarles botas a nuestros hijos”

Y el esfuerzo ha dado sus frutos: Marc Márquez es octacampeón del mundo y su hermano Álex, bicampeón.

Marc Márquez en una imagen de archivoNURPHOTO via GETTY IMAGES

Los Márquez Alentà son una familia de éxito. No son demasiados los casos en los que dos hermanos consiguen proclamarse campeones del mundo. Marc Márquez ha logrado hacerlo en ocho ocasiones (una en 125cc, una en Moto2 y seis en MotoGP) y Álex Márquez en dos (una en Moto3 y la otra en Moto2).

Sin embargo, los inicios de la historia no fueron tan felices como ha podido parecer esta semana en la aparición de Marc Márquez en el programa Joaquín, el novato de Antena 3. La madre de ambos pilotos, Roser Alentà, llegó a confesar en un reportaje del medio estadounidense The New York Times que “a veces no cenábamos para ayudar a comprar botas para nuestros hijos”.

En ese sentido, Roser resalta que “la gente ve dónde Marc y Alex están ahora, pero nosotros sabemos que ha habido muchos sacrificios para llegar ahí”.

Los sacrificios de la familia Márquez

Marc Márquez, en una entrevista en la Cadena Ser en 2019 tras coronarse como campeón del mundo de la categoría reina, reconoció la importancia del apoyo de su familia para triunfar: “Hay un entorno a tu alrededor que es el que te hace tener ganas, estabilidad y tranquilidad para concentrarte en pilotar”.

Además, Marc agradeció todo lo que han sacrificado sus padres para que pudiera dedicarse al motociclismo: “Si con cuatro años tú pides la moto y tu padre o tu madre te dice que nanay, entonces no hay moto. Ellos sacrificaron mucho para que yo hoy en día estuviese aquí”.

También intervino en esa entrevista su madre, quien destacó que “mi hijo ha renunciado a tener una vida como la que tiene un chico de 24 o 25 años. Cuando él era pequeño nosotros renunciamos a muchas cosas de fin semana”.

Finalmente, todos esos esfuerzos familiares han dado sus frutos con creces, pero la realidad es que no siempre ha ido todo sobre ruedas en la casa de los Márquez Alentà.