Quién es Lars Klingbeil, el nuevo hombre fuerte de los socialdemócratas alemanes que debe negociar con Merz

Los socialdemócratas alemanes ya tiene nuevo hombre fuerte a cargo de la dirección del grupo parlamentario. Perteneciente al ala más conservadora del SPD, la elección de Lars Klingbeil marca un cambio generacional en el liderazgo de la formación. Su designación, además, llega después del descalabro electoral del pasado domingo, en los que anotaron su peor resultado en 138 años. Ahora, Klingbeil asume el papel de principal negociador con los conservadores de la CDU y con los que debe explorar la formación de una nueva gran coalición que frene el crecimiento de la ultraderecha Alternativa por Alemania (AfD).

"Yo mismo he dirigido dos negociaciones para cerrar una coalición, fue algo emocionante y también nos preparó para lo que está por venir. Con la votación y el resultado obtenido hoy, ahora tengo un fuerte respaldo para afrontar estas conversaciones", apuntó Klingbeil después de su elección. Con un respaldo del 85,6% de los votos, sin embargo, el político ha obtenido menos apoyos que su predecesor, Rolf Mützenich, líder desde el año 2019.

El líder de la CDU y futuro canciller de Alemania, Friedrich Merz, ha felicitado a Klingbeil por su nombramiento y ha expresado su deseo de establecer "una buena relación de trabajo de cara a la próxima legislatura". Merz ha subrayado la importancia de su papel en la estabilidad política del país, para que el que apuesta por cerrar un acuerdo, más pronto que tarde, que dé paso a una nueva gran coalición que mantenga el cordón sanitario que se le aplica a la ultraderecha, segunda fuerza del Bundestag y principal de la oposición.

Klingbeil, originario de Baja Sajonia y perteneciente al ala más conservadora del Partido Socialdemócrata, ha dado un paso al frente tras el anuncio del excanciller, Olaf Scholz, la misma noche electoral, de que no participará ni en las negociaciones que se establezcan ni tampoco en el próximo Gobierno. A sus 47 años, el político será una figura clave tanto para su partido como en este complejo proceso de formación del gobierno alemán.

Las conversaciones con la CDU y su socio, la bávara Unión Socialcristiana (CSU), están previstas para el 6 de marzo en formato 6+6, con seis representantes de cada bloque. Klingbeil ha destacado la responsabilidad que tienen los socialdemócratas para garantizar un gobierno estable para Alemania: "Soy consciente de la responsabilidad que tenemos como socialdemócratas de hacer fuerte a este país y de garantizar que tengamos un gobierno capaz de actuar. Esa será también la voluntad del SPD cuando se pongan en marcha las conversaciones, aunque el éxito también depende de Friedrich Merz".

Las prioridades impuestas por los conservadores para estas negociaciones se centran en tres cuestiones fundamentales: política exterior y de seguridad, migración y economía. Sin embargo, Klingbeil ha criticado que la CDU haya hecho públicas algunas propuestas antes de iniciar un diálogo formal y ha exigido la máxima discreción. "Tenemos interés en reforzar las Fuerzas Armadas, nos interesa que haya muchas más inversiones en nuestro país de las que llegan hoy. También estamos dispuestos a hablar de si se aún se pueden hacer cosas en esta legislatura y, en caso afirmativo, de cómo", ha señalado respecto a las filtraciones de la CDU sobre un posible gasto extra de 200.000 millones en Defensa.

Según el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung, Merz ha planteado la posibilidad de que el presupuesto extraordinario se apruebe antes de la constitución de la nueva Cámara Baja, ya que después socialdemócratas y conservadores perderán la mayoría de dos tercios necesaria para sacarlo adelante. Klingbeil ha sido tajante al respecto: "Las propuestas de las que nos enteremos por los medios o portales de internet quedan automáticamente fuera de la mesa de negociación. Si queremos hablar en serio, hablaremos en serio y eso significa confidencialidad y no escenificación pública".