La Plazuela: "Todo depende de cuánto empeño le pongas a interesarte por la cultura, no es lo mismo apropiar que apreciar"

En 2023 un joven dúo granadino se colaba entre las loas de las revistas especializadas en una nueva ola de reivindicación de las raíces andaluzas con proyectos como Califato 3/4, Carmen Xía, Bronquio, Derby Motoreta's Burrito Kachimba o María José Llergo. Con entonces solo 25 años, Nitro (Luis Abril) e Indio (Manuel Hidalgo) llegaban desde la ciudad nazarí que ha visto nacer éxitos como Los Planetas, Miguel Ríos o Lori Meyers con ese Roneo Funk Club bajo el brazo para llenar recintos en la capital con cerca de 10.000 asistentes y una gira que los llevó por festivales por toda España.

Sin embargo, tras el lanzamiento de este trabajo, en el que mezclaban el funk y el groove con sus sonidos más flamencos, se orientaron al EP La Caleta junto a David de Jacoba en el que experimentaban la electrónica con distintos palos flamencos. Pero también les sirvió para parar, una parada necesaria para apartarse de los focos y de la rueda artística, pero también para reencontrarse consigo mismos. De ahí sale ese Lugar Nº0 (D.L.Y.), donde hacen una búsqueda identitaria bajo ese "don't lose yourself (no te pierdas a ti mismo)" y hacen repaso a lo que quieren mantener y lo que quieren dejar ir.

También a nivel personal. "Sacáis tanto veneno pa' la hora de hablá / He tapao to' mi' herida' y ahora me estoy curando / Pensadlo to' dos vece antes de podé opiná / También está el derecho de quedarse callao", canta Nitro en Si miro patrás, el que fue el primer adelanto de este trabajo cargado de sonidos groove y jazz sin perder esa esencia flamenca y andaluza —con bandas de cornetas y tambores de Semana Santa incluidas— y donde experimentan con sonidos como la salsa.

Pero más allá de los nuevos sones musicales, este disco les ha servido para ubicarse y para evolucionar y situarse en una posición distinta, por ejemplo, a la hora de negociar conciertos o festivales. 

"Estamos intentando que no sea como en las giras anteriores en el sentido de conseguir mejores condiciones. A veces, con una banda de nueve músicos en el escenario después de currarte los sonidos y pegarte una paliza muchos meses antes de empezar una gira, luego te dan un check line de 15 minutos y se va el garete todo lo que llevas trabajando", señala el Indio, quien recuerda que también han aprendido a gestionar esa "fama" con amigos y familiares. 

"Mi madre me decía el otro día ‘Oye, Luis, que yo ya estoy acostumbrada’. No acostumbrada a que tú seas súper famoso, sino acostumbrada a que de repente te vea en la tele o que alguien me hable de ti o que me llamen para decirme 'oye, qué guay la nueva canción de tu hijo' o a que esté dando clases y a uno de los niños le gusta La Plazuela", apunta el Nitro.

¿Qué es para vosotros ese Lugar Nº0? ¿Cómo definiríais ese punto de partida? ¿Es un reseteo con respecto a Roneo Funk Club o es otra cosa?

Indio: No, no. O sea, no consideramos que sea un punto de partida. De hecho, justo el número cero es como el único número que no es ni positivo ni negativo, está ahí como entre las dos cosas. Es como una especie de limbo, de transición hacia algo que no sabemos muy bien qué es.

Pero que sí se ha sentido un poco este periodo como momento de reflexión respecto a lo anterior, lo que venimos haciendo y qué tipo de proyectos queríamos construir un poco a largo plazo. Aparte en lo personal, lo que ha significado este momento que estamos viviendo también con respecto a nuestros amigos, a que ya se empiezan a establecer un poco las cosas, empiezan a hacerte otro tipo de preguntas. Es un poco como un espacio intermedio.

De hecho, el disco empieza con esa canción homónima con esa reflexión que empieza con Nitro, hablando del estímulo de las pantallas, de cómo estamos sobre estimulados. ¿O habéis apartado un poco de las redes, de la tecnología y demás para meteros en este proyecto?

Nitro: No, no. Recuerdo que fue una cosa también que pensamos o lo pensé solo yo, no me acuerdo. Pero no ha sido como tanto una cosa de “vamos a alejarnos de las redes sociales”. A nivel interno, nosotros, de utilizar las redes sociales, hemos seguido teniendo la aplicación y tal, pero de La Plazuela, sí es verdad que nos hemos quitado las redes sociales un tiempo a nivel proyecto, tanto de los escenarios como de Instagram, entrevistas y tal.

Nosotros sí que hablamos en esa intro del disco, un poco esa reflexión, como que nos incluimos también como parte de querer cambiar esto también desde nosotros mismos.

En Si miro patrás, Indio comentabas antes de cómo habían cambiado las relaciones con el éxito, ¿habéis tenido muchas decepciones?

Indio: Algunas, sí. Pero bueno, tampoco es… Creo que estamos contentos de que, al final, la gente importante sigue siendo con nosotros igual que siempre y, al final, es la gente que nos importa. Los que han sido nuestros amigos desde siempre, desde chiquitillos, con los que seguimos siendo igual de amigos, con los que no hablamos de cosas de música cuando estamos juntos, así que eso es lo importante. Lo demás le puede pasar a cualquiera, te dediques a la música o no.

A veces se tiene la visión de que los artistas son siempre artistas y viven en una nube, ¿no? Vosotros seguís siendo los mismos.

Nitro: Creo que también nuestra familia y nuestro entorno se han acostumbrado ya a más cosas. Creo que hubo un momento que fue un poco de repente raro, pero tanto para nosotros como para todo el mundo. Mi madre me decía el otro día ‘Oye, Luis, que yo ya estoy acostumbrada’. No acostumbrada a que tú seas súper famoso, sino acostumbrada a que de repente te vea en la tele o que alguien me hable de ti o que me llamen para decirme "oye, qué guay la nueva canción de tu hijo" o a que esté dando clases y a uno de los niños le guste La Plazuela. Son cosas que también se va acostumbrando ya todo nuestro entorno y nosotros mismos también.

Habéis contado para esa canción con la Banda de la Victoria del Realejo, creéis que hay una tendencia por parte de muchos artistas desde andaluces como Califato 3/4 o Saiko a otros como Nathy Peluso o C.Tangana de incluir estos sonidos de cornetas y tambores, ¿creéis que apropiación cultural como a veces se critica o no?

Indio: Bueno, en vuestro caso evidentemente no.

¿Pero creéis que se está banalizando un poco o creéis que es una forma de abrir también la cultura andaluza?

Indio: Creo que eso es una cosa que depende de cuánto empeño le pongas a interesarte y a saber apreciar la cultura. No es lo mismo apropiar que apreciar. Entonces, creo que en algunos casos será una cosa más banal y en otros de verdad será una cosa identitaria. Cuando Califato lo hizo obviamente es identitario. Cuando nosotros lo hemos hecho, igual. Me refiero, somos andaluces, nos gusta la Semana Santa y son sonidos de nuestra tierra. Entonces depende de cómo cada uno lo haya hecho en su proceso, que no sé cuál habrá sido. Pero obviamente yo parto de la base de que si lo hace alguien de Andalucía es algo que casi no puedes esquivar, y en ciertos barrios más todavía.

En mi casa del Albaicín los fines de semana se escuchan las bandas ensayando para la Semana Santa. Cuando llega la semana lo estás escuchando en la calle todo el rato. Hay mucha cultura de eso, independientemente de si eres más creyente o menos, porque es una cosa ya cultural.

Entonces si lo hace alguien de fuera de Andalucía, pues ya no sé con qué intención o con qué grado de apreciación a esa cultura o de qué era entenderla de verdad. Pero si lo hace en Andalucía me parece totalmente natural hacerlo. Es parte de la banda sonora de nuestra cultura.

¿Cómo veis la escena en Granada? ¿Creéis que hay más oportunidades de gestar proyectos locales desde allí sin necesidad de venir a Madrid o a Barcelona?

Nitro: Pues sí es verdad que en estos dos, tres últimos años yo personalmente me he sentido un poco más desconectado. Creo que obviamente se están haciendo cosas, pero no sé muy bien por dónde está tirando la escena... Me está dando la sensación como que estoy viendo muy escenas urbanas, reguetón y tal, que ahí estoy un poco más desconectado, la verdad. Sí que siguen saliendo artistas, por ejemplo, una chica que se llama Naz, que mola que te cagas, siguen apareciendo gente haciendo cosas muy guais

De hecho, nosotros también estamos haciendo algunas fiestas en Granada, hay eventos y tal, un poco también para no perder un poco la huella de qué cosas siguen pasando por allí. Pero es verdad que la movida de donde veníamos de allí, de Granada, ya sí se ha estandarizado un poco más y hemos salido un poco todos fuera, unos vuelven, otros se han quedado, otros no sé qué. Pero no sé muy bien qué gente nueva está saliendo.

Indio: Yo lo que sí he notado últimamente es como si hay una cierta intención por parte de alguna gente de Granada de crear como infraestructura. Hay sellos que están funcionando bastante bien, se están abriendo estudios nuevos con una calidad increíble. Promotores que están intentando hacer cosas desde Andalucía, empresas de merchandising... Hay mucha gente intentando crear como toda la infraestructura necesaria para tener un proyecto musical y eso es algo precioso.

De hecho, hicisteis la presentación del disco en Granada y no en Madrid.

Indio: Sí, hicimos como una cosa más chiquitita, como una escucha más para nuestro entorno, para algunos medios y en Granada sí hicimos ya como el evento en sí.

¿Creéis que podría chocar algún sonido de temas como la Cara de Dios a los seguidores de los anteriores discos? ¿Hay alguna influencia nueva que os haya marcado especialmente?

Nitro: Creo que se hemos dejado bastante claro todos estos años que en verdad nosotros escuchamos de todo y que podemos hacer bastantes cosas. Igual que hemos hecho temas más electrónicos, hemos hecho canciones más acústicas, creo que siempre hemos mezclado bastantes estilos. No creo que diga nadie “¿cómo que han hecho esto?”. Igual a alguien le sorprende que le gusta la salsa, pero creo que no se queda como algo tan fuera de lo que es nuestra personalidad.

Indio: También hemos intentado que tampoco se alejaran demasiado de hacer un tema entero de salsa, sino que existieran esos elementos, pero recurrir también un poco a esa conexión con la parte más jazz en el interludio, del que sí hay como esos recursos en otros temas. 

La primera parte sí tiene un groove un poco más parecido al resto de temas y lo intentamos conectar así, pero sí que puntualmente nos apetecía contar con otros músicos que también son bicharracos y que nos apetecía hacer cosas con ellos como justo ese tema en el que han participado gente de fuera también. Pero bueno, son cosas que escuchamos de verdad y con todo respeto a las otras músicas, hemos intentado también incluir gente que se dedica a esos géneros para encontrar nuestra forma de poder colaborar con esos músicos también.

¿Sentís presión de estar continuamente pensando o produciendo nuevos proyectos?

Nitro: Por nuestra parte no tenemos a nadie que nos presione, igual la presión la podemos tener más por cómo nosotros vemos lo rápido que van las cosas. De repente este verano que no hemos hecho gira, ves a todos tus colegas girando y piensas "hostia, igual nosotros deberíamos estar también ahí, hostia, ¿por qué no estamos ahí? Mierda". Y justo este disco, que hemos tardado mucho tiempo en hacerlo y que ha sido realmente un proceso lento, creo que lo hemos hecho desde la seguridad. Pero bueno, también es verdad que ha habido momentos de "hostia, a lo mejor tenemos que hacernos otra cosa".

Es verdad que creo que también ahora entramos en un punto que no nos apetece, por ejemplo, encerrarnos un año y medio para hacer un tercer disco. Ahora también nos apetece un poco girar, experimentar, también un poco abrirnos a las cosas y no estar tan para adentro.

¿Y cómo se forjó esa colaboración con Ángeles Toledano en Sólo eres pa' mí?

Nitro: Pues bueno, Ángeles es una amiga nuestra de hace ya mucho tiempo y a ver... Tampoco digo nada, ¿no? O sea, era una guía que tenía el Nitro y bueno...

Indio: Pues teníamos la idea esa como de meter una voz femenina y se te ocurrió a ti.

Nitro: Bueno que es bonito en verdad... O sea, yo estuve saliendo con ella un tiempo y justo cuando la dejamos hice esa canción. Joder, como terminamos de una manera tan bonita sí que pensaba mucho "me encantaría como que cantáramos los dos esta canción".

Al final como que habla un poco también de esa historia, de esas cosas y se hizo un poco así, me acuerdo hasta de preguntarle “oye, ¿te apetece en verdad que cantemos este tema los dos juntos?” Y fue también como algo bonito. Entonces, viene como un poco de ahí, porque yo estaba como haciendo la canción y me imaginaba su voz. Vaya exclusiva te he dado, eh (risas).

¿Y ese Don’t Lose Yourself? Venía si no me equivoco también de un audio de una amiga vuestra, ¿no?

Indio: Sí, me lo mandó una amiga alemana que es fotógrafa, por eso lo dice en inglés, que tampoco es que hubiera una intención estética ahí. Ella también se dedica al arte y estábamos en un momento ahí de conversación de hablar un poco de cómo funciona tanto su mundo como el mío, siendo dos campos creativos diferentes. Sobre cómo a veces la rueda de las cosas de estar haciendo tanto, cosas que te gustan y otras que no tanto, ese debate de lo que tienes que hacer pero no te inspira tanto... En esa conversación surgió ese audio de forma natural y estuvimos hablando el Nitro y yo de ello cuando se lo enseñé.

Me hizo darme cuenta justo de que lo que le hablaba a ella, de como que hay etapas en la vida en las que hay que abrazar ese momento de dejar ahí una cosa y empezar a hacer otra con buena actitud. 

Al escucharlo en otra persona que dijera eso, me di cuenta de que sí había una relación común entre las letras que el Nitro y yo estábamos escribiendo en ese momento, que todas hablaban un poco de esa angustia de sentir que las cosas están cambiando, de que hay cosas que vives con nostalgia, pero que sabes que ya hay que dejarlas atrás, y los miedos de las cosas que están por venir. En ese desprenderte de lo de antes y empezar a construir lo nuevo, pero sin querer soltar una cosa y con miedo a la otra, como en ese limbo surgió esa idea de ese Lugar Nº0.

Nos pareció bonito que justo al final de ese audio, lo único que decía es lo importante es que nunca te pierdas a ti mismo y no dejes de ser tú. Lo metimos ahí con esa intención de que fuera un momento importante en el disco, de darnos cuenta de que realmente sin nosotros habernos dado mucha cuenta todo lo que se estaba hablando en las letras trataba un poco eso.

A la hora de preparar un setlist para la gira, ¿cómo os sentís empastando estos temas con otros más antiguos como Tangos de Copera o Antigua judería? ¿Hay alguna canción que os cansa?

Indio: A ver, yo creo que lo guay de ser una banda y de sentir que también tenemos mucha versatilidad musical es que los temas al final nunca se acaban.

Nitro: Yo siento que aunque tengamos canciones que digamos “coño, estamos hartos de tocarlas”, sé que le podemos dar una vuelta para que nos vuelvan a motivar porque al final son canciones que nos gustan. Creo que para esta nueva gira podrá ver la gente alguna cosita de esas.

¿Os habéis visto obligados a parar en Madrid? Amaia, por ejemplo, anunció hace poco que en su próxima gira no iba a pasar por la capital, mientras que Rosalía solo ha anunciado conciertos en Madrid y Barcelona.

Indio: Bueno, nosotros creo que hemos tocado más veces en Murcia que en Madrid, depende bastante.

Nitro: Nosotros justo con tocar es una cosa que no tenemos problema y lo que sí queremos es que todo el mundo nos vea. Es verdad que si tienes que elegir lugares que igual pueda acercarse más gente o que te puedan dar una disponibilidad a nivel de espacios y de calidad que también le puedas dar a tu público, eso puede ser cosa de las ciudades más grandes. O encontrar recintos más grandes para hacer cosas más chulas. Nosotros aparte de estas fechas que también hemos hecho de Granada, Madrid y Barcelona, saldrán más, saldrán muchas más.

¿Y con los festivales cómo os lleváis?

Indio: Bien, estamos cerrando cosillas. Estamos intentando que no sea como en las giras anteriores en el sentido de conseguir mejores condiciones. A veces, con una banda de nueve músicos en el escenario después de currarte los sonidos y pegarte una paliza muchos meses antes de empezar una gira, luego te dan un check line de 15 minutos y se va el garete todo lo que llevas trabajando.

Sí estamos intentando que las cosas que cerremos sí nos den por lo menos un tiempo bien para probar, que sea una hora que sea bonita para estar ahí con la gente y tal, que se puedan desarrollar todas las luces y lo que se ha ido preparando porque si no es una pena que se pierda con tanta prisa de los festivales estos que van ahí a piñón de querer meter 20 en una tarde.

Es verdad que ahí se me nota un poco el salto de poder hacer cosas más de nuestra manera. Está guay los festivales porque también te ves rodeado como de muchos artistas que también mola ver, que también tienes la oportunidad de descubrir a otros que a lo mejor no conocías y, como te ha pillado por allí, pues a lo mejor los ves y te sorprende, y eso es muy guay. Pero a veces también se pierde un poquillo todo el trabajo previo de una gira cuando las cosas van tan rápido.