Luis Mateo Díez, el leonés de un pueblo minero que recibe los premios literarios más importantes

Luis Mateo Díez, el leonés de un pueblo minero que recibe los premios literarios más importantes

El escritor que ocupa el sillón ele minúscula de la Real Academia Española desde el año 2001, es el Premio Cervantes 2023.

Fotografía de archivo de Luis Mateo Díez, Premio Cervantes 2023.Sergio Barrenechea

El prolífico escritor leonés Luis Mateo Díez, nacido en 1942 en Villablino, un pueblo minero que en la actualidad tiene poco más de 8.000 habitantes, ha sido reconocido este martes con el Cervantes y es además el único autor en lengua castellana que posee dos Premios Nacionales de Narrativa y Crítica.

Mateo Díez es un defensor de la oralidad como sedimento de las palabras, pues en su caso las aprendió y escuchó durante su niñez a través de sus mayores, también en forma de leyendas, cuentos o romances en reuniones familiares y sociales.

Terminó el Bachillerato en León y se licenció en Derecho por la Universidad de Oviedo. Sin dejar a un lado la literatura que le apasionaba desde joven, obtuvo una plaza en el Ayuntamiento de Madrid por oposición (1969) y con el tiempo fue jefe del departamento de Documentación.

Cofundador de la revista poética Claraboya (1963-1968), este prolífico escritor publicó su primer libro, los relatos 'Memorial de hierbas', en 1971.

Posteriormente llegaron los cuentos de 'Apócrifo del clavel y de la espina' (1972) y su 'Relato de Babia' (1981). Luego vio la luz su primera novela, 'Las estaciones provinciales' (1982), seguida por 'La fuente de la edad', premiada con el Nacional de la Crítica en 1986 y el Nacional de Narrativa en 1987.

El escritor, miembro del jurado de numerosos certámenes literarios, arrancó en 1997 una colección de autores leoneses con 'Días del desván' y dos años después fue reconocido con el Premio de la Crítica en narrativa en castellano por 'La ruina del cielo' (1999).

Mucho después, y tras numerosos libros publicados, Luis Mateo Díez participó con 'El búho viajero' (2010) en la colección de autores 'Antología y voz' y en 2012 presentó su primer título para público infantil, 'El niño de plata', que incluyó la colección 'Mi primer' de Arturo Pérez-Reverte.

Elegido en el año 2000 académico de la Lengua para la vacante del poeta Claudio Rodríguez (sillón 'I'), al año siguiente ingresó en la Real Academia con el discurso 'La mano del sueño'.

Entre sus últimas obras están 'La soledad de los perdidos' (2014), 'Los desayunos del Café Borenés' (2015), 'Vicisitudes' (conjunto de cuentos finalista del Premio de la Crítica de Castilla y León en 2018), 'El hijo de las cosas' (2018), 'Juventud de cristal' (2019) o 'El limbo de los cines' (2023).

Donó a la Biblioteca Nacional, en febrero de 2013, sus novelas manuscritas 'La fuente de la Edad' (1986), 'El expediente del náufrago' (1992) y 'Fantasmas del invierno' (2004). Además, entregó la pluma con la que escribió la primera de estas novelas y el manuscrito y la primera copia con correcciones a mano de 'El expediente del náufrago'.

Traducida a distintas lenguas, su obra ha sido objeto de tesis doctorales en universidades de todo el mundo y algunos libros han sido llevados al cine.

Además de los galardones mencionados también figuran Premio Café Gijón por 'Apócrifo del clavel y la espina' (1972), Premio Ignacio Aldecoa por 'Cenizas' (1976), Premio Castilla y León de las Letras (2000), Premio de la Crítica de Castilla y León por 'Los frutos de la niebla' (2009), Premio Francisco Umbral por 'La cabeza en llamas' (2012), Premio de Literatura de la Comunidad de Madrid (2015).

En 2022 recibió un homenaje en el Instituto Cervantes bajo el título 'Territorios imaginarios de Luis Mateo Díaz'. Está casado y es padre de dos hijos, entre ellos Gonzalo, también escritor.