Muchos verán extraño colocar gomas del pelo en los pomos de las puertas, pero tienen una gran utilidad
Es una de las herramientas domésticas más versátiles que existen.

A simple vista, colgar una goma del pelo en el pomo de una puerta puede parecer una excentricidad sin sentido o una moda pasajera. Sin embargo, este gesto tan sencillo se ha convertido en un truco doméstico cada vez más popular en varios países europeos.
En Eslovaquia comenzó a extenderse como una solución práctica para pequeños problemas cotidianos. Según un medio local, la idea consiste en colocar una goma del pelo alrededor de los dos pomos de una puerta, de manera que quede tensa entre ambos lados. De este modo, cuando la puerta se cierra, el pestillo no llega a encajar del todo.
El resultado es una puerta que puede abrirse con mucha más facilidad, incluso cuando se tienen las manos ocupadas con bolsas de la compra, cajas, maletas o un carrito de bebé. Este pequeño truco evita portazos, golpes innecesarios y la frustración de quedarse bloqueado sin poder girar el pomo.
Una goma del pelo que sirve para casi todo
Más allá de la comodidad, quienes lo usan destacan que también reduce el ruido de las puertas al cerrarse y resulta especialmente útil en casas con niños pequeños, personas mayores o mascotas, ya que disminuye el riesgo de atraparse los dedos. No es extraño que, poco a poco, esta solución casera haya ido cruzando fronteras y ganando terreno en redes sociales.
Además, la utilidad de las gomas para el pelo no se limita a sujetar el cabello o las puertas. De hecho, muchos consideran que se trata de una de las herramientas domésticas más versátiles que existen. En el armario, por ejemplo, colocar coleteros en los extremos de una percha evita que la ropa más delicada —como camisetas de tirantes, blusas de seda o vestidos ligeros— se resbale y termine en el suelo.
También resultan muy prácticas para organizar o sujetar objetos de forma rápida. Si es necesario ordenar cables, cerrar un paquete improvisado o agrupar documentos, una goma del pelo puede resolver la situación en cuestión de segundos. En la cocina, su papel es igual de útil ya que sirven para cerrar bolsas de alimentos abiertas, asegurar tapas que no ajustan bien o incluso mantener cerrados frascos que no cuentan con un sistema hermético.
Pequeñas soluciones para grandes despistes
Quienes defienden estos trucos aseguran que una simple goma puede salvar el día en más de una ocasión. Desde evitar que una taza con tapa mal cerrada se derrame dentro de un bolso hasta mantener un envase sellado durante el transporte, los coleteros se convierten en un gran recurso de emergencia.
Lo que demuestra esta tendencia es que a veces, basta con mirar los objetos cotidianos desde otra perspectiva. Esa goma del pelo que suele olvidarse en un cajón o perderse en el fondo del bolso puede convertirse en una aliada imprescindible en casa.
