De la calabaza al vino tinto: los tonos de maquillaje que están arrasando este otoño
No son solo cosa de Halloween.
Hay tantas formas de maquillaje como gustos, pero cada temporada hay ciertas tendencias que se abren paso sobre otras. Este otoño, por ejemplo, triunfan las sombras de ojos inspiradas por el estilo gótico que también reina en las tiendas, o el efecto buena cara gracias a tonos tostados para mantener un look natural y ligeramente bronceado.
Lo mismo sucede con la llegada de ciertas estaciones del año, cuando se prestan más ciertos tonos que otros para maquillar el rostro. Es el caso de la tendencia de utilizar tonos calabaza en cuanto llega el otoño, que ahora se ha popularizado bajo el nombre Pumpkin Spice Makeup.
Para conseguirla, basta simplemente con utilizar colores que, como explican los expertos de Too Faced, evocan "la calidez de las especias y la calabaza". ¿Cuáles son? "Los naranjas profundos, marrones suaves, dorados bronce, rojos quemados, o tostados". Para conseguir el efecto de calidez en el rostro, el paso principal es aplicar de manera armónica los productos de estas tonalidades en los labios, las mejillas y los ojos.
Según los consejos de la marca, lo ideal es utilizar naranjas y terracota en labios y mejillas; dorados y cobre en los ojos; bronceados ligeros sobra la piel para aportar profundidad y tonos marrones o neutros para hacer una transición entre los párpados y los labios.
Para aplicar esta tendencia de maquillaje se puede optar por utilizar labial, colorete y sombra de ojos o bien un producto multiusos como el Cloud Crush Whipped Lip & Cheek de la firma, que se está viralizando por la posibilidad de aplicarlo fácilmente en diferentes zonas del rostro.
Y si la calabaza es sinónimo de Halloween y del otoño, todavía lo es más el vino tinto, que no falta ni en las mesas ni en los armarios, con los tonos granates o burdeos como protagonistas de esta etapa el año. Este otoño esa tendencia también se traslada al rostro con el Red Wine Makeup, que está pisando fuerte reforzada por la estética gótica y la nostalgia de los labios granates profundos de los noventa.
"Se trata de un estilo monocromático en el que los rojos profundos y los berries adquieren protagonismo absoluto", explican desde Rare Beauty. Los expertos de la marca explican que puede llevarse de dos maneras. La primera de ellas, más intensa, apostando por una sombra de ojos ahumada en tonos burdeos. ¿Cómo conseguirla? "Una base neutra en la cuenca —beige cálido o marrón claro— prepara el terreno antes de añadir tonos vino o ciruela en la esquina externa del ojo. Para aportar mayor profundidad, un toque de marrón chocolate en el extremo resulta efectivo sin endurecer en exceso el acabado", aconsejan.
Por el contrario, si se prefiere un resultado menos intenso y para poder llevar también durante el día, la recomendación es utilizar en labios y mejillas tonos similares de esta gama de colores. Precisamente esta opción de modular los tonos vino hace que esta tendencia sea perfecta para todos los gustos. "La versatilidad define este estilo: funciona tanto en un maquillaje diurno con rubor ligero y labios satinados como en un look nocturno marcado por un ojo ahumado burdeos y labios borgoña profundos", destacan desde Rare Beauty.