Boticaria García advierte del trastorno intestinal que te puede ocasionar cortar la sandía en la playa
El problema deriva en los grados a la orilla del mar, normalmente superiores a la óptima para su conservación a temperatura ambiente durante unas horas.

El verano es temporada de frutas refrescantes. Los melones y las sandías llenan las cestas de las compras de los españoles que después pasan a ser el postre en las mesas o directamente en las playas si están disfrutando de una jornada en el mar.
Ante esto último, la reconocida farmacéutica y nutricionista, María de los Ángeles García García, más conocida como Boticaria García, advierte que "si eres de los que corta la sandía en la playa, si no llevas nevera, la cosa puede acabar en diarrea".
De acuerdo a García, en los días playeros, los huevos son los que generan un mayor temor por el riesgo de salmonelosis o cualquier otra enfermedad gastrointestinal si no se conservan a una temperatura correcta, pero "unos crían la fama y otros cardan la lana", sostiene, en referencia a la sandía.
Boticaria García hace hincapié en que cada año aumentan los casos de gastroenteritis por el consumo de frutas voluminosas tales como sandía, melón, papaya o piña. Recuerda que de abrir una sandía y sobrar la mitad o un cuarto, se puede mantener a temperatura ambiente, a unos 20 o 25º durante 3 horas, pero el problema radica en que "nunca suele hacer esa temperatura a la orilla del mar".
La solución pasa por llevar a la playa la sandía ya cortada en trozos en un tupper, que puedas meterla en la nevera, dado que una entera, una mitad o un cuarto suelen ser "demasiado grandes" para meterlas en estos frigoríficos portátiles.
Asimismo, es fundamental "meterla inmediatamente en la nevera" con el correspondiente tupper cerrado una vez se hayan consumidos los cachos para así favorecer a su correcta conservación.
Consumo de sandía en España
De acuerdo a los últimos datos del panel de consumo alimentario del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Castilla La-Mancha se ha posicionado como unas de las comunidades autónomas con mayor consumo de melón y sandía en España, seguida por Extremadura y Castilla y León.
A nivel nacional, los hogares españoles consumieron 663,5 millones de kilos de melón y sandía entre junio de 2024 y mayo de 2025, lo que representa un 8,6% con respecto al año anterior. En cuanto al consumo personal, cada español comió de media 14,16 kilos de melón y sandía al año, un 7,9% más que en el ejercicio anterior.
