Si pasas por esta calle de Sevilla encontrarás una de las joyas ocultas en plena ciudad
Conserva elementos históricos del año 1184.

Sevilla es una ciudad que deslumbra con su belleza y su esencia inigualable. Pasear por sus calles es como recorrer un museo al aire libre, donde cada edificio es una obra de arte y cada rincón cuenta una historia. Desde majestuosos monumentos hasta encantadores parques, Sevilla ofrece un sinfín de joyas arquitectónicas y naturales que invitan a detenerse, admirar y dejarse llevar por el encanto único de esta ciudad andaluza.
Su rica historia, combinada con una vibrante cultura, convierte a Sevilla en un lugar que cautiva a todos los que la visitan. En pleno centro, se esconde una de sus joyas más secretas. Se trata de la Plaza del Cabildo, a menudo eclipsada por los grandes monumentos y atracciones de la ciudad, esta plaza semicircular es un rincón que merece ser descubierto por quienes buscan admirar lo más auténtico y singular en su visita.
Ubicada en el encantador barrio del Arenal, justo al lado de la majestuosa Catedral de Sevilla, la Plaza del Cabildo ofrece un espacio de tranquilidad y belleza arquitectónica. A diferencia de otras plazas, esta no se encuentra directamente en una calle transitada. Su acceso se realiza a través de los edificios que la rodean, con entradas discretas desde las calles Arfe y Almirantazgo, así como desde la Avenida de la Constitución.
Sus orígenes
La historia de la Plaza del Cabildo es tan fascinante como su arquitectura. Construida en el lugar donde una vez estuvo el Colegio de San Miguel, que pertenecía al cabildo de la Catedral, su diseño actual es obra del arquitecto Joaquín Barquín Barrón. La plaza conserva elementos históricos como un trozo de muralla interior almohade del año 1184, integrándose perfectamente con los nuevos edificios que la rodean.
Mercadillo todos los domingos
Pero esta joya oculta no solo es un tesoro para los amantes de la historia y la arquitectura. Cada domingo, la plaza cobra vida con un mercadillo de sellos y monedas, atrayendo a coleccionistas y curiosos por igual. Es un lugar donde la historia se mezcla con la vida cotidiana, creando una experiencia única para sus visitantes.
Si estás planeando un viaje a Sevilla, asegúrate de incluir la Plaza del Cabildo en tu itinerario. Este tesoro escondido, lejos del bullicio turístico, te ofrecerá una perspectiva diferente de la ciudad y te permitirá descubrir uno de los rincones mejor guardados de Sevilla.