El amor sin fronteras: de una ucraniana a los sirios, y viceversa
Estoy convencida de que como voluntaria conseguiré dar un poco de luz a las vidas de los refugiados sirios con los que trabajo en Turquía; que podré animar a mis amigos y a otra gente aún desconocida a ayudar, apoyar, a echar una mano a los que sufren, a los que necesitan su atención. Lograr esto sería un gran éxito y una enorme satisfacción para mí.