Alerta en Europa por el aumento de casos de joyas que no cumplen las normas de seguridad: incluyen metales que pueden poner en riesgo la salud
Hay centenares de casos circulando por la Unión Europea.

Pulseras, pendientes, collares con 'sorpresa'. Crece y crece la cantidad de piezas de joyería (más bien bisutería) que contienen metales pesados como el cadmio, el plomo o el níquel.
Estas sustancias, una vez que entran al cuerpo, pueden causar reacciones alérgicas, intoxicación digestiva e incluso problemas renales graves, apuntan los médicos al respecto de su auge.
El asunto de las joyas 'falsas' aparece en la prensa rumana, donde se recoge el "alarmante" número de piezas en el mercado que no cumplen las normas básicas en seguridad. Solo en una de las aplicaciones de alerta europeas se han publicado más de 170 casos en toda la Unión Europea.
"En el momento en que la Comisión Europea decide que un producto debe estar en un sistema de alerta, significa que supone un peligro tan grave para la salud o la integridad física que ese producto debe ser retirado inmediatamente de la lista", apunta Sorin Mierlea, presidente de Infocons.
Entre las alertas hay de todo, principalmente imitaciones de materiales como la plata. Es el caso de unas piezas originarias de Suecia que están en el mercado de varios países y que, realmente, contienen plomo, no plata.
Tanto este metal como el cadmio son recursos habituales entre los productores de piezas de bajo perfil para reducir su coste o incluso en falsificaciones. El cadmio para soldar y el plomo para añadir peso, lo que busca incrementar su valor.
La absorción que la piel puede realizar de dichos ingredientes conduce a graves problemas médicos. La anemia es causada por la absorción de plomo, intoxicación digestiva, problemas renales graves y, dependiendo de la cantidad ingerida, incluso la muerte. Esto también se aplica al cadmio, añade la dermatóloga Mihaela Leventer.
