Andrew Tate, referente de la manosfera, a juicio por cuatro supuestas violaciones
El Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales celebra este martes una vista preliminar del juicio civil que afronta, mientras él y su hermano tienen con causas abiertas por abuso sexual, maltrato, tráfico de menores y blanqueo de dinero.

“Es lo del celibato involuntario, es la mierda de Andrew Tate”. Así describe un policía el tipo de contenido que ve Jamie, el protagonista de Adolescencia (Netflix), en sus redes. Se refiere a un influencer norteamericano y británico de extrema derecha y uno de los referentes de la llamada manosfera, esa red de sitios web, blogs y foros en línea que promueven la masculinidad enfatizada, la hostilidad hacia las mujeres o misoginia, y una fuerte oposición al feminismo.
Tate, de 38 años y también creador de contenido racista y homófobo, es noticia no sólo por su aparición en la serie del momento, sino porque este martes tiene que sentarse ante la justicia para hacer frente a una acusación de cuatro supuestas violaciones a mujeres, un caso que se revisará en el Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales.
En concreto, se celebra una vista preliminar del juicio civil iniciado por cuatro mujeres que le acusan de varios delitos de violación, agresiones y control coercitivo. Todos ellos ocurrieron en las ciudades inglesas de Luton y Hitchin, entre los años 2013 y 2015. La demanda se suma a otras causas que siguen abiertas contra él y su hermano, Tristan Tate, tanto en el Reino Unido como en Estados Unidos y Rumanía, también por presunto abuso sexual, maltrato, tráfico de menores y blanqueo de capitales, entre otros delitos.
Según informa El Periódico, dos de las presuntas víctimas tuvieron una relación con Tate entre 2013 y 2014, mientras que las otras dos trabajaron en su negocio de webcams eróticas en 2015.
La primera de ellas, presentada como AA en los documentos judiciales, relata varios episodios de amenazas y agresiones. En uno de ellos, el influencer la apuntó presuntamente con una pistola, refiriéndose a sí mismo como el “jefe”, y le ordenó hacer lo que decía o “habrá un infierno que pagar” (casi suena a Donald Trump). En otra ocasión, la denunciante asegura que la agarró por el cuello y la inmovilizó contra la pared.
Explica el diario que los episodios de asfixia son algunos de los casos más relatados por las víctimas en sus testimonios. "Una de ellas sostiene que Tate la estranguló mientras mantenían relaciones sexuales hasta perder el conocimiento y que él siguió adelante a pesar de su estado", incluso. "Me decía que le pertenecía y me pedía que le dijera que le quería", aseguró en una entrevista a la BBC.
Otras víctimas relatan que los estrangulamientos eran tan frecuentes que desarrollaron pequeñas manchas de sangre en los ojos, un efecto secundario común en los casos de asfixia. Tate también amenazó presuntamente con “matar” a cualquiera que hablara con ellas, en un intento de intimidarlas y de coartar su libertad.
Todas estas acusaciones son, para Tate y su defensa, una “sarta de mentiras” y “burdas invenciones”. Recuerdan que la Fiscalía de la Corona ya renunció a presentar una acusación penal contra él en 2019, tras investigar los casos presentados por tres de las denunciantes.
“Hemos visto otros casos de gran repercusión en los que acusaciones de similar gravedad se derrumbaron bajo el escrutinio, pero solo después de que ya se hubiera producido un daño irreparable a la reputación [del acusado]. El señor Tate se defenderá enérgicamente y confía en que la verdad prevalecerá”, ha relatado un portavoz del acusado.
La vista preliminar se celebra pocas semanas después de que otra exnovia de Tate, Brianna Stern, presentase una denuncia contra él en Los Ángeles. Stern asegura que cuando empezó la relación, en verano de 2024, Tate se mostró cariñoso y encantador, hasta el punto de que su noviazgo parecía un “sueño hecho realidad”.
Poco después, sin embargo, la actitud del influencer se volvió agresiva y amenazante, repitiendo el patrón relatado por otras de las denunciantes. La presunta víctima ha explicado un episodio, ocurrido el pasado marzo en el hotel Beverly Hills, en el que fue golpeada, asfixiada y amenazada de muerte por Tate mientras mantenían relaciones sexuales.
En Estados Unidos los Tate también se enfrentan a un caso civil de una mujer que alega que los hermanos la obligaron a realizar trabajo sexual y luego la difamaron después de que ella testificara ante las autoridades rumanas.
Tiene un caso polémico también en Rumanía: enfrentan cargos de violación, tráfico de menores y blanqueo de dinero. Los dos hermanos fueron arrestados por primera vez en ese país en diciembre de 2022, Andrew, acusado de violación y trata de personas, y Tristan como sospechoso de trata de personas.
Ambos negaron los cargos y pasaron varios meses bajo arresto domiciliario. Un año después, en agosto de 2024, enfrentaron nuevas acusaciones que incluían relaciones sexuales con una menor y trata de menores.
Andrew, quien había aparecido en el programa de televisión británico Gran Hermano, se mudó de Reino Unido a Rumania hace varios años. Sin embargo, la policía inglesa sigue solicitando su extradición por acusaciones separadas y no relacionadas de violación y trata de personas, así como de evasión fiscal.