Confunden un derrame cerebral con una otitis, el paciente de 18 años muere y la familia recibe una indemnización tres años después
Los padres de la joven dicen sentirse "decepcionados" y recurrirán la sentencia.
Sentencia para el Servicio Andaluz de Salud. Los juzgados de Cádiz han condenado a los servicios sanitarios a indemnizar con más de 60.700 euros a los padres de una joven después de que los médicos confundieran su derrame cerebral con una otitis. La paciente, de 18 años, finalmente falleció.
Según publica el medio Economist and Jurist, la sentencia aplica a la "teoría de la perdida de oportunidad", que se refiere a "aquellos casos en los que a pesar de no poder establecerse si una determinada conducta ha provocado un daño, existen motivos suficientes para entender que con el comportamiento debido habría existido a lo menos una posibilidad de que el resultado lesivo no se hubiera producido". "Aunque se hubiera hecho todo bien, sólo tenía un 33% de posibilidad de sobrevivir, dada la gravedad del ictus".
En este sentido, "la familia está decepcionada con la sentencia porque sólo reconoce el retraso del diagnóstico". Para su defensa, hubo dos errores "gravísimos". El primero, que Urgencias pidió un TAC, "que no hicieron por el cambio de turno"; y el segundo, "que hubo un error de diagnóstico en la primera alta, donde se produjo la confusión".
El abogado de la familia, en declaraciones recogidas por el medio especializado, ha revelado que "el equipo sanitario borro el diagnóstico erróneo para que no se descubriera en la historia clínica que existía un fallo". Por ello, informa que la familia recurrirá a la sentencia, reclamando, en este sentido, una indemnización de 182.323,10 euros.
De acuerdo a la información difundida, los hechos se remontan a septiembre de 2022, cuando alrededor de las 18.00 la joven acudió junto a sus padres a un centro de Urgencias en la localidad gaditana de Chiclana de la Frontera. "Presentaba vértigo, pérdida de conocimiento con relajación de esfínteres, otalgia derecha y dolor que se reflejaba en la mandíbula". La joven fue destinada al hospital más cercano.
"Tras la exploración le dieron el diagnóstico de otitis, le prescribieron un tratamiento para el dolor de cabeza y para los síntomas de vértigo, y finalmente, le dieron el alta", reza la publicación. Ante los signos negativos que presentó la joven, sus padres decidieron quedarse en el centro hospitalario por si la joven no manifestaba mejoría. Horas más tarde, fue sometida a una intervención quirúrgica e ingresada en la UCI, donde desgraciadamente murió.