La industria de la alimentación busca personal. El sector, que emplea sólo en Francia a 750.000 personas, contrata constantemente a nuevos perfiles de múltiples roles: empleados de tienda, profesionales de la alimentación, cadena de suministro, etc.

Según publica el medio francés Le Figaro, dado que el sector sufre una "imagen negativa" entre los candidatos por la dureza de los puestos, las empresas tienen a menudo dificultades para encontrar nuevos perfiles. Sin embargo, muchos de ellos deberían tener en cuenta la movilidad interna. "Dentro de la marca Leclerc, por ejemplo, la mayoría de los ejecutivos promovidos a puestos de responsabilidad provienen de la promoción interna".

Sin embargo, cuando los empleados no están recomendados por miembros de la empresa, Laurie Innocenzi, directiva en el grupo Adecco, asegura en declaraciones recogidas por el digital que "las marcas se interesan por perfiles con un nivel educativo mínimo de dos años de carrera, lo que justifica una primera experiencia de tres años en un puesto de un supermercado". "No estamos encontrando ninguna dificultad en contratarlos", asegura.

De acuerdo a un estudio de remuneraciones consultado por el medio, en Francia los responsables de tienda reciben un salario bruto anual de entre 45.000 euros (para un perfil con tres años de experiencia) y 100.000 euros (ocho años de experiencia). Además, "quienes trabajan en un hipermercado ganan un 15% más".

Sin embargo, entre las marcas, los datos cambian. En Lidl, el gerente de tienda recibe un salario anual fijo de 51.971 euros brutos desde el momento de la contratación, es decir, unos 3.380 euros netos al mes. En cambio, en la marca francesa Leclrc, reciben un salario bruto anual de entre 50.000 y 120.000 euros, durante 13 meses, dependiendo del tamaño de la tienda. Es decir, entre 3.250 y 7.800 euros mensuales, tal y como concluye la publicación.

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