La isla paradisiaca con unos 4.000 habitantes cuyo 98% de la totalidad pertenece a un solo hombre con un plan
El empresario compró el encalve en 2012 por unos 300 millones de dólares.

Una nueva noción para definir la propiedad privada. Casi toda la isla de Lanai, desde casas y negocios hasta tierras costeras, está bajo el control del multimillonario Larry Ellison. Tal y como informa el diario rumano Observator News, el empresario posee el 98% de la sexta isla más grande de Hawai. De hecho, la compró en 2012 por el "módico" precio de 300 millones de dólares (unos 258.000 euros en la conversión actual).
De este modo, Ellison posee dos complejos turísticos de lujo, la mayor parte del fondo inmobiliario y casi toda la infraestructura comercial de la isla. Este enclave pacífico está habitado por unas 4.000 personas, y, por tanto, sus vidas, sus trabajos, su desarrollo e incluso sus servicios públicos dependen en gran parte de las decisiones de una sola persona.
Según la información recabada, el empresario, cofundador de Oracle Corporation, mantiene una fortuna estimada en los 285.000 millones de dólares (unos 245.000 millones de euros en la conversión actual). Él mismo ha explicado que quiere convertir la isla de Lanai en un modelo de sostenibilidad ecológica. No obstante, su visión no ha quedado exenta de críticas.
"Centralizar la tierra en manos de un solo propietario significa que las decisiones de conservación y desarrollo se basan principalmente en sus intereses comerciales, más que en el consenso público", reza el medio de comunicación. "Esto crea limitaciones para los habitantes en su capacidad de influir en el destino de la isla que llaman hogar".
Una granja hidropónica de 500 millones de dólares
Una de las propuestas más comentadas de Ellison es una granja hidropóica de 500 millones de dólares (unos 430.000 euros en la conversión actual), presentada como un avance de la economía sostenible. Esto "no cumplió las expectativas" de los locales, quienes alimentaron sus dudas sobre esta supuesta transformación "verde". De hecho, los residentes afirman que la infraestructura de energía limpia y las iniciativas medioambientales se desarrollan principalmente en beneficio de los resorts de lujo, no de la comunidad, tal y como avanza el periódico.
La empresa tiene una versión muy distinta. "Estamos comprometidos a preservar el frágil ecosistema de la isla de Lanai, gestionar sus recursos naturales, controlar la erosión, mantener la biodiversidad y desarrollar iniciativas sostenibles en beneficio de la isla", afirmó la compañía en un comunicado remitido a los medios de comunicación.
