La psicología señala las 7 expresiones que más emplean las personas de clase media
Pueden revelar rasgos como soberbia, evitación emocional y falta de empatía, entre otros

El concepto de clase media está presente en la mayoría de los debates sobre economía, política y bienestar social. Sin embargo, su definición no se basa ––como muchos creen–– en el salario promedio, sino en la mediana de ingresos, un indicador que refleja de forma más fiel la realidad económica.
La clase media se encuentra donde la mitad de la población gana por encima de ese nivel y la otra mitad, por debajo. Instituciones como la OCDE, Eurostat y Eurofound utilizan este parámetro para establecer umbrales sociales y determinar quién pertenece a la clase baja, media o alta.
En Europa, según la OCDE, se considera clase media a los hogares cuyos ingresos equivalentes se sitúan entre el 75 % y el 200 % de la renta mediana nacional. Por debajo de este rango se encuentran los ingresos bajos y la población vulnerable, mientras que por encima se ubica la clase alta, caracterizada por su mayor estabilidad económica.
La clase media
Aun así, la composición de la clase media difiere notablemente entre países: mientras en Europa Central y del Norte representa más del 60 % de la población, en naciones con mayores desigualdades —como Rumanía o Bulgaria— su tamaño es considerablemente menor.
En el caso de Rumanía, los ingresos medios siguen por debajo de la media europea y el riesgo de pobreza continúa siendo elevado, especialmente en zonas rurales. Aunque el país ha experimentado subidas salariales en los últimos años, la vulnerabilidad económica persiste y la clase media rumana carece de la estabilidad que sí caracteriza a la de otros Estados de la UE.
Las 7 expresiones
Pero más allá de los números, un estudio mencionado por El Economista pone el foco en el comportamiento. Según la psicología, existen siete expresiones recurrentes entre personas de clase media-alta con mala educación, o con baja disposición emocional a gestionar conflictos. Estas frases, según los expertos, pueden revelar rasgos como soberbia, evitación emocional, falta de empatía o incapacidad de autocrítica.
- “Es lo que hay” / “Eso es todo”: Expresan resignación y muestran poca voluntad para abordar problemas o conflictos.
- “No es mi problema”: Refleja desentendimiento de responsabilidades y cierta desconexión emocional con los demás.
- “Te lo dije, siempre tengo la razón”: Suele indicar arrogancia o una fuerte necesidad de validación.
- “No me importa”: Puede resultar hiriente y deteriorar relaciones al invalidar emociones ajenas.
- “Así soy yo”: Una forma de evitar la autocrítica y justificar comportamientos dañinos o rígidos.
- “Eso es una tontería”: Minimiza el argumento de la otra persona y denota falta de empatía.
- “No tengo tiempo para estas cosas”: Se utiliza para rechazar emocionalmente las preocupaciones de otros sin afrontarlas.
Aunque estas expresiones pueden aparecer en cualquier estrato social, los psicólogos señalan que, dentro de la clase media-alta con escasa inteligencia emocional, se vuelven especialmente frecuentes.
