Los arqueólogos no caben en su asombro por el misterioso zapato encontrado en un fuerte romano
En las ruinas de un fuerte romano en el norte de Inglaterra han descubierto calzado de hace unos 2.000 años que llega hasta la talla 49.5.

Los arqueólogos han descubierto en las ruinas de un fuerte romano en el norte de Inglaterra hasta ocho pares de zapatos que miden al menos 30 centímetros y que se encuentran en una horquilla de tallas entre la 47.5 y la 49.5. Uno de estos zapatos de cuero, incluso, ostenta el récord actual de ser el zapato más grandes encontrado por los investigadores de la Vindolanda Charitable Trust, con 32,6 cm de largo.
El legendario Muro de Adriano, levantado por los romanos a partir del año 122, marcaba la frontera norte de uno de los imperios más grandes y duraderos de la historia y servía de defensa de las tribus del norte, sobre todo frente a los pictos, en lo que ahora es Escocia. Cerca de este pedazo de la historia, durante las excavaciones del Fuerte Magna, se han encontrado 32 zapatos de cuero antiguos, según la nota de prensa difundida por los investigadores del yacimiento. Estos se suman a los alrededor de 5.000 zapatos de la era romana recuperados en diversas excavaciones de la zona a lo largo de los últimos años.
A partir de esta colección —que también incluye pequeños patucos, sandalias de verano y botas de marcha— la Fundación Benéfica de Vindolanda ha obtenido "una visión asombrosa de los hombres, mujeres y niños que ocuparon este puesto fronterizo del norte a partir de estas prendas tan personales" que datan de hace casi 2.000 años, según remarca la nota de prensa.
La doctora Elizabeth Greene, profesora asociada de la Universidad de Western Ontario y especialista en calzado de Vindolanda, ha visto y medido todos los zapatos de la colección. "Creo que en Magna ocurre algo muy diferente. Incluso con esta pequeña muestra descubierta, es evidente que estos zapatos son, en promedio, mucho más grandes que la mayoría de la colección de Vindolanda", afirmó.
"Si bien estamos comparando esta nueva colección de Magna, que aún no ha pasado por el proceso de conservación, con los zapatos de Vindolanda que sí lo han hecho, incluso considerando una contracción máxima de hasta 1 cm/10 mm, sigue siendo un tamaño considerable", agregó Greene.
Rachel Frame, arqueóloga sénior del Proyecto Magna, comentó: "Hallazgos orgánicos como este se encuentran entre los más valiosos de nuestros yacimientos, que cautivan la imaginación tanto de visitantes como de voluntarios, pero también son los que corren mayor riesgo debido al cambio climático".
"Esto nos muestra claramente el riesgo que corremos si el cambio climático continúa privándonos de información tan vital. Nos recuerda que no todas las poblaciones eran iguales, que las grandes variaciones entre los regimientos y las personas que sirvieron a lo largo del Muro de Adriano podían ser culturales y físicas", apuntó, por su parte, el doctor Andrew Birley, director ejecutivo y director de excavaciones del Trust.
Birley remarcó que "sin artefactos como estos maravillosos zapatos de Magna y Vindolanda, sería casi imposible obtener información como esta". "Solo podemos celebrar y maravillarnos ante la diversidad y las diferencias de estos pueblos cuando podemos verlos en los datos arqueológicos que recopilamos hoy", concluyó.
