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Los niños se ponen a jugar al fútbol y la acción de un vecino hace que todo acabe en multa: "Mi hijo me llamó llorando"

Los niños se ponen a jugar al fútbol y la acción de un vecino hace que todo acabe en multa: "Mi hijo me llamó llorando"

La policía de Murano multó con 50 euros a varios padres porque sus hijos jugaban en una plaza, lo que ha desatado críticas por “falta de sentido común”.

Dos niños juegan al fútbol en las calles de Barcelona.
Dos niños juegan al fútbol en las calles de Barcelona.Jakub Porzycki

En Murano, la isla veneciana famosa por su vidrio soplado y su calma de convento, la pelota ha sido declarada persona non grata. Según ha publicado Le Parisien, varios padres han recibido una multa de 50 euros después de que sus hijos, de 12 y 13 años, fueran sorprendidos jugando al fútbol en la plaza Pino Signoretto. El detonante fue un vecino molesto por el ruido, que decidió llamar directamente a la policía.

Los agentes llegaron, tomaron los datos de los niños y extendieron un acta oficial. “Mi hijo me llamó en llantos”, relató Antonio Trampus al diario La Stampa. “La policía no quiso escuchar nada. Podrían habernos avisado a los padres para que los lleváramos a casa. En vez de eso, cogieron sus nombres y direcciones”. El documento entregado a las familias subraya que el fútbol en la plaza está prohibido desde 2019 porque “perturba la tranquilidad pública y representa un peligro para los transeúntes”.

La sanción inicial es de 50 euros, pero si no se paga en un plazo de 60 días, la cifra puede escalar hasta los 500. “No pagaremos”, advirtió Trampus, que ha anunciado junto a otros padres su intención de recurrir y de dirigirse al alcalde de Venecia, Luigi Brugnaro. Argumentan que la plaza, fruto de un reciente proyecto urbanístico, no estaba incluida en el listado de zonas vetadas y que, a diferencia de otras, resulta idónea para que los niños jueguen al aire libre.

“Viva los niños que juegan en la calle”

El episodio ha levantado ampollas en la política local. El concejal Marco Gasparinetti denunció la actuación policial como “desproporcionada”: “¿Eran estafadores? ¿Carteristas? ¿Narcotraficantes? No, eran padres de niños”, ironizó en Facebook. También insistió en que problemas como la seguridad ciudadana o el turismo masivo merecen más atención que una pachanga infantil.

Hasta el exfutbolista Paolo Poggi se ha sumado al coro de críticas. En declaraciones a La Nuova Venezia, sentenció: “Vivan los niños que pasan tiempo fuera de casa. Las reglas son sagradas, pero el sentido común tendría que haber prevalecido”.

Mientras tanto, la pequeña Murano ya se ha ganado un nuevo mote entre los padres: la isla donde jugar al fútbol puede costar más caro que ver un partido de la Serie A.