No tires los rollos de papel higiénico vacíos: son un tesoro en manos de los que conocen este truco
Desempeñan un papel clave en la creación de un jardín sano.

En el mundo de la jardinería, cualquier detalle puede marcar la diferencia entre un jardín saludable y uno marchito. Quienes se dedican a esto saben que el éxito no depende solo del riego o la luz solar, sino también de mantener un suelo fértil, con buen drenaje y bien equilibrado en nutrientes.
Aquí entra en juego un objeto que normalmente terminaría en la basura, pero que tiene múltiples beneficios ecológicos y prácticos: los tubos de cartón que quedan cuando se acaba un rollo de papel higiénico. Sí, esos cilindros que a menudo descartamos sin pensarlo pueden ser un valioso recurso para quienes desean un jardín más verde y fértil.
Estos cartones son ideales para compostar, ya que se descomponen con facilidad y actúan como una excelente fuente de carbono, equilibrando los residuos ricos en nitrógeno, como restos de frutas, verduras y césped. Además, su uso reduce la cantidad de residuos sólidos que terminan en los vertederos.
Cómo sacarles el máximo partido
Existen dos formas principales de reutilizar los rollos de papel higiénico en el jardín para obtener los mejores resultados:
- Como recipiente biodegradable para plántas. Basta con llenar el tubo con tierra y sembrar dentro de él. Una vez que la planta haya germinado y esté lista para ser trasplantada, se puede colocar el tubo entero directamente en la tierra. El cartón se descompondrá de forma natural, integrándose al suelo sin afectar a la planta.
- Abriendo los tubos y colocándolos directamente en el suelo o mezclándolos con otros residuos orgánicos en la compostera. Lo importante es asegurarse de que estén completamente limpios, sin restos de papel ni pegamento, para evitar introducir materiales que puedan afectar el equilibrio del suelo.
Beneficios: mejora el drenaje y atrae a las lombrices
El cartón también desempeña un papel clave en la mejora del drenaje del suelo. Absorbe el exceso de humedad y ayuda a mantener una buena aireación, lo que favorece el crecimiento de raíces más fuertes y sanas.
Además, los rollos de papel higiénico son un excelente material de cama para las lombrices, insectos esenciales en cualquier ecosistema de jardín porque transportan nutrientes y minerales hasta la superficie mediante sus deshechos, además de que los túneles que excava oxigenan la tierra.