Rafael, fisioterapeuta de Cádiz que trabajó en Francia: "Los autónomos pueden llegar hasta los 6.000 euros si se cumplen determinadas características"
Destaca que los trabajadores por cuenta propia puden ahorrar hasta 25.000 euros en un año.

Rafael, fisioterapeuta, llegó a Francia en 2019, justo después de acabar sus estudios. "Fue aquí cuando me di cuenta de que los sueldos eran mucho más elevados que en España", recuerda en delcaraciones a El Español. En poco tiempo entendió que el mercado laboral francés ofrecía salarios que permitían algo casi utópico para muchos jóvenes: ahorrar.
Tras dos años, decidió dar un paso más y crear su propia empresa, Fisio en Francia, desde la que asesora a jóvenes sanitarios que desean seguir sus pasos. "Hemos trabajado con más de 800 personas que buscan puestos de diferentes ramas sanitarias en el extranjero", explica.
Uno de los argumentos que más peso tienen sus clientes a la hora de decidirse por emigrar son, sin duda, los salarios. "En el caso de los asalariados, los sueldos oscilan entre 2.000 y 3.000 euros netos", afirma Rafael. Unas cifras que superan ampliamente los salarios medios de los fisioterapeutas en España.
Los autónomos pueden ganar aún más. Según explica, "estos pueden llegar hasta los 6.000 euros si se cumplen determinadas características". En ese escenario, el ahorro se dispara: "En un año en Francia se pueden llegar a ahorrar hasta 25.000 euros si se trabaja como autónomo". Para los asalariados, la cifra ronda "unos 10.000 euros anuales".
No obstante, para Rafael, el atractivo va más allá del sueldo. "El hecho de irse a vivir fuera de tu país no es solamente una experiencia que te ayuda a ganar dinero y ahorrar, sino que también es un desarrollo personal", asegura. "Estar un año en el extranjero te va a ayudar más que si estás cinco años en tu mismo país", añade.
Contraste con los sueldos españoles: "Lo difícil no es hacerse a Francia, lo difícil es irse de ella"
Un fenómeno curioso que describe Rafael es la facilidad con la que los profesionales se adaptan al país vecino. "Lo difícil no es hacerse a Francia, lo difícil es irse de ella", afirma. La explicación, resume, está en la combinación de condiciones laborales dignas, salarios competitivos y alta demanda de fisioterapeutas.
En España, donde el estilo de vida es cada vez más caro, los sueldos son notablemente inferiores a Francia, aunque pueden variar en función de la especialidad y otros factores, tal y como refleja La Universidad Europea citando al portal Indeed:
- Entre 25.000 y 40.000 euros brutos al año en la sanidad pública, dependiendo de la experiencia y la ubicación.
- Entre 15.000 y 20.000 euros inicialmente en la privada, aunque con experiencia pueden superar los 45.000 euros.
- En el ámbito deportivo, los profesionales experimentados pueden alcanzar los 60.000 euros, aunque el comienzo suele rondar los 24.000 euros.
- En fisioterapia de suelo pélvico, los salarios se sitúan entre 1.400 y 2.000 euros brutos al mes, llegando a más de 35.000 euros anuales en perfiles especializados.
- En fisioterapia pediátrica, las retribuciones oscilan entre 18.000 y más de 38.000 euros al año.
- En fisioterapia neurológica, el rango va de 19.000 a 40.000 euros brutos, en función de la especialización.
Además, factores como la antigüedad, la responsabilidad del puesto y los complementos específicos pueden modificar el salario entre 100 y 600 euros mensuales. Aun así, para muchos jóvenes el panorama sigue siendo insuficiente comparado con el impulso económico que Francia puede ofrecerles desde el primer día.
