Revelan la larga lista de riesgos detrás del inocente gesto de sentarse frente a la ventana este verano
Cuidado con los bronceadores: provocan acné.
Tomar el sol y broncear la piel es una moda que nunca muere. A pesar de los peligros que supone estar expuestos a los rayos uva del sol en verano, muchos jóvenes siguen bronceando su piel. El medio finés Iltalehti ha enumerado cuatro factores que "todo el mundo debería saber", entre ellos, tomar el sol a través de la ventana.
Rayos Uva
Broncearse desde una cama de rayos uva "no es más saludable" que hacerlo al sol. De acuerdo a la información difundida, los rayos que generan estos dispositivos de solárium "son más fuertes". El uso de estas camas, aumenta el riesgo de "melanoma, carcinoma basocelular y carcinoma de células mixtas".
Una información recabada, la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó estas camas de la radiación UV como cancerígenas en 2009. Además, el uso del solárium está prohibido para personas menores de 18 años.
La radicación de la ventana puede envejecer
"Si terminas pasando mucho tiempo cerca de una ventana, debes protegerte de la radiación, ya que la radiación que penetra en el vidrio envejece la piel", reza la publicación. Cabe destacar que los parabrisas de los automóviles modernos tienen una película que es impermeable a la radiación UV.
La piel bronceada puede quemarse
Según lo publicado, el bronceado proporciona una protección muy débil contra las quemaduras solares. De este modo, se recomienda utilizar siempre un protector solar con un FPS de al menos 30. "Es buena idea cubrirse los ojos y la cabeza con gafas de sol y un sombrero".
Los aceites bronceadores provocan acné
En declaraciones recogidas por el medio, Sonia Khorana, especialista en dermatología y medicina estética, revela que "las personas que usan estos productos pueden ser más propensos a exponerse regularmente a los rayos UV del sol y, por lo tanto, los productos que aceleran el bronceado pueden aumentar el riesgo de cáncer en la piel".
Asimismo, un estudio recabado por el digital confirma que el acné y otras afecciones de la piel fueron más comunes entre los usuarios de agentes bronceadores que entre los que no usan los productos.
