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Un quitapolvos sencillo y económico para limpiar tu alfombra manda a los cepillos y la aspiradora al armario

Un quitapolvos sencillo y económico para limpiar tu alfombra manda a los cepillos y la aspiradora al armario

Quizás tengas que usar estos utensilios, pero de la manera más sencilla posible.

Imagen de archivo de una persona limpiando una alfombra.Getty Images

Cada vez más personas optan por soluciones naturales para la limpieza del hogar, y las alfombras no son una excepción. Usar productos químicos especializados para este objeto puede resultar contraproducente debido que suelen contener sustancias agresivas perjudiciales para la salud y el medio ambiente. 

Por eso, muchos prefieren alternativas más ecológicas, eficaces y económicas. En este sentido, los remedios caseros tienen varias ventajas: son más accesibles, ya que sus ingredientes suelen estar en cualquier despensa; no contaminan, al no contener químicos sintéticos; y, lo más importante, son seguros tanto para humanos como para mascotas. Además, cuando se preparan correctamente, son muy eficaces para eliminar manchas, olores y polvo.

En el caso de las alfombras, es muy sencillo elaborar un limpiador casero. El proceso es simple y solo se necesitan cinco ingredientes:

  • 2 vasos de agua tibia.
  • 1/4 taza de vinagre blanco.
  • 1 cucharada de jabón de castilla líquido.
  • 1 cucharada de bicarbonato de sodio.
  • 10 gotas de aceite esencial (opcional; puede sustituirse por zumo de limón).

Una vez tengas todos los ingredientes preparados, solo hay que mezclarlos en un recipiente hondo hasta obtener una solución homogénea. Después, vierte el líquido en un atomizador para facilitar su aplicación. Antes de usarlo en toda la superficie, es recomendable probar en una zona pequeña para asegurarse de qe no afecte el tejido de la alfombra. 

Rocía el producto sobre la alfombra, frota suavemente con una esponja o cepilla y deja actuar entre 10 y 15 minutos. Después, si quieres, puedes aspirar para retirar los restos de suciedad. Para manchas difíciles, repite el proceso y aumenta ligeramente la cantidad de bicarbonato y vinagre.

Este limpiador casero puede conservarse en un frasco cerrado en un lugar fresco y oscuro, lo que lo convierte en una opción práctica y sostenible para mantener tu hogar limpio y saludable.

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