Una tiktoker pregunta en España y Polonia cuál es la mejor edad para casarse y tener hijos: hay grandes diferencias de pareceres
Una decisión marcada por el tejido cultural de cada sociedad.
Las diferencias culturales son uno de los aspectos más destacables que distinguen las sociedades de los distintos países. Estas particularidades configuran las miradas y expectativas que sus ciudadanos depositan sobre el matrimonio y la formación de una familia. Desde las tradiciones ancestrales que marcan rituales y edades “apropiadas” para dar este paso, hasta las dinámicas sociales y económicas que moldean las prioridades de cada generación.
En este contexto, la popular creadora de contenidos Pola Jankowska ha recorrido las calles de España y Polonia para plantear a jóvenes de ambos países una pregunta sencilla pero reveladora: “¿Cuál crees que es la edad ideal para casarse y tener hijos?”. Las respuestas y los debates que han suscitado ponen de manifiesto cómo los factores culturales, económicos y sociales modelan las expectativas vitales de cada sociedad.
Un debate cultural
En España, la mayoría de encuestados sitúan la edad idónea para dar el paso del matrimonio y la maternidad/paternidad a partir de los 30 años. Frases como “En mi mente no está casarme ni tener hijos, pero a partir de los 35 igual” o “Yo te diría a partir de los 33, ahora no, ahora hay que vivir la vida” se repitieron una y otra vez, marcando un rango que oscila entre los 30 e incluso los 40 años para algunos.
Aun así, no faltaron opiniones de quienes descartan el matrimonio o los hijos, reflejo de la creciente diversidad de proyectos personales en la sociedad española. “No hay que tener hijos”, aseguraba una encuestada entre risas pero fiel creyente de su postura. En contraste, en Polonia la prioridad de formar una familia se traslada a la veintena.
Varios jóvenes polacos afirmaron que la edad ideal para casarse y tener un primer hijo se sitúa entre los 23 y los 29 años, con respuestas como “Entre 27 y 29 años, como máximo 30 años” o “Creo que 26 años es lo mejor”. Hay quienes aseguran incluso que entrada la veintena ya es momento de asentar cabeza y que los 30 ya es demasiado tarde. Esta diferencia subraya la presión social por consolidar la familia a una edad temprana.
Las costumbres familiares más arraigadas, la menor carga económica para independizarse y una red de apoyo comunitario más intensa ayudan a explicar por qué muchos polacos eligen casarse y ser padres durante la primera mitad de la veintena. No obstante, la mejor edad para hacerlo sigue siendo una elección profundamente personal, influida por el tejido cultural de cada país y las expectativas individuales de cada generación.
