Creyó haberse llevado algo único del Teide y al llegar a casa supo que no: su gozo en un pozo

Creyó haberse llevado algo único del Teide y al llegar a casa supo que no: su gozo en un pozo

"No puede ser".

Tuit de @retretuitTwitter: @retretuit

El usuario @retretuit ha publicado un hilo de Twitter contando una divertida anécdota de cuando uno de sus tíos, "uno de los tipos más peculiares" que ha conocido, fue a visitar el Teide (Santa Cruz de Tenerife) en los años 90.

Antes de explicar lo sucedido, ha descrito, de manera jocosa, qué tipo de persona era: "Triunfó en sus negocios, pero siempre vivía fuera de la norma. El clásico que estando en Estados Unidos se va a dar un paseíto y lo tiene que meter la policía en un coche patrulla porque ha ido a parar al Bronx".

"También lo quisieron echar de un teatro en Londres por hacer una foto con flash viendo 'Los miserables', pero esa es otra historia", ha continuado contando la internauta.

A continuación, ha empezado a relatar su visita al Teide: "Le dijeron, de manera clara y directa, que estaba prohibido coger nada de allí arriba, que tenían yo no sé cuantos visitantes al año y que, si todo el mundo se llevaba una piedra, en tres años en vez de un volcán tienen un hoyo". 

Sin embargo, este no hizo caso a las normas y, al creer haber visto una exclusiva "piedra volcánica transparente del tamaño de una colilla, más o menos", decidió hacer como que se ataba los zapatos para metérsela en el bolsillo y así llevársela a casa.

"Ya en el hotel, muy cuidadosamente, la envolvió en un pañuelo y en plástico de burbujas para no tener problemas en el aeropuerto", ha señalado, y, al llegar a Sevilla, su lugar de residencia, quiso regalársela a su hija. 

"Te traigo lo nunca visto. Yo creo que no hay otra igual en el planeta", le dijo entusiasmado. La joven, intrigada, le preguntó por la sorpresa y, al verla, respondió así: "Papá, ¿tú llevabas las gafas cuando subiste al Teide?".

Y es que no debía de llevarlas porque se trajo del Teide un "Pictolín", un famoso caramelo de eucalipto que, efectivamente, cuenta con un envoltorio blanco y transparente, por lo que lo confundió con una "piedra volcánica".

El relato ha generado mucha expectación en la red. La mayoría de los usuarios han manifestado su sorpresa por la divertida historia.

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Fotógrafa y periodista. Graduada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y Técnica Superior en Imagen e Iluminación. En la actualidad es redactora de El HuffPost, antes en el departamento de redes sociales de Cadena Ser. Contacto: cristina.valdivielso@huffpost.es