Salvador Sobral deja clarísimo lo que piensa de España tras abandonar Eurovisión por la presencia de Israel
El ganador de 2017 está triste.

La salida de España de Eurovisión —miembro importante de la Unión Europea de Radiodifusión (UER)— ha provocado una oleada de reacciones por todo el mundo, la mayoría a favor de esta decisión que ha tomado RTVE.
Además de España también Países Bajos, Eslovenia e Irlanda han decidido que mientras esté Israel en el festival no participarán. Esto ha propiciado, por ejemplo, la reacción del ganador de Eurovisión de 2017, el portugués Salvador Sobral, que ha criticado que su país siga en el festival que este 2026 se celebrará en Viena.
En un vídeo grabado desde su coche, Sobral ha cargado contra la "cobardía política" de las instituciones públicas portuguesas y ha dejado claro que no está en contra del Festival da Canção —el Benidorm Fest portugués— pero que la recompensa podría ser otra y no ir a Eurovisión.
"Esta cobardía política que tenemos es consistente con la cobardía institucional de las instituciones públicas. Me pone triste, porque no es sólo un tema político, es un problema humano, y la decisión es obvia", ha dicho el cantante.
Y ha añadido: "Lo que puedo hacer es hacer una apelación. No estoy en contra del Festival da Canção, al contrario. Creo que debería suceder, porque es una buena muestra para artistas, cantantes y compositores portugueses. Es extremadamente importante: hay poca visibilidad y las emisoras de radio solo tocan música americana".
España, en el lado bueno de la historia
Por esto propone: "Así que, para mí, es simple: quien gane el Festival da Canção no va a Eurovisión. Es una decisión fácil. El Festival se puede celebrar con otro tipo de recompensa. Y si eso no lo decide la cadena pública, entonces depende de los artistas participantes tener esa claridad".
En el mismo vídeo ha contado que la decisión de mantener a Israel en el festival le ha llegado mientras estaba dando un concierto en el que se recaudaban fondos para los palestinos de Gaza: "España y varios países decidieron no participar y situarse en el lado bueno de la historia".
Ha querido dejar claro que la decisión de que Portugal participe la toma la cadena pública de su país "porque nadie preguntó nada a los portugueses".
